El Santander y BBVA no pagan en España por los depósitos pero dan el 2% en otros países
Ambos bancos, como el resto de principales rivales, descartan entrar en nuestro país en una guerra por el ahorro tradicional pese al alza del euríbor y de los tipos
La presidenta del Santander, Ana Botín | Europa Press
El Santander y BBVA, como el resto de grandes bancos españoles, descartan una guerra de precios para captar depósitos en España. Pero en otros países donde los grupos nacionales operan ya han tenido que mover ficha y adentrarse en la batalla para captar clientes y negocio. Tanto el banco cántabro como el vasco remuneran ya un 2% por las imposiciones a plazo en Alemania e Italia, respectivamente, según los datos recabados por THE OBJECTIVE.
A pesar de la presión del BCE para que las entidades de todo el Viejo Continente trasladen la subida de los tipos y la remontada del euríbor a los productos de ahorro de los usuarios, los principales bancos en España se mantienen en sus trece de no incrementar las rentabilidades ni de las cuentas a la vista ni de los depósitos, ya que consideran que atraen clientela a través de otros mecanismos y no necesitan liquidez para operar.
Sin embargo, la estrategia que están llevando a cabo en otros mercados es diferente. Al igual de lo que ocurre en España con firmas extranjeras y de pequeño tamaño que operan a través de los canales digitales, tanto el Santander como BBVA se han metido de lleno en la pelea del pasivo con elevadas remuneraciones en países de nuestro entorno.
Depósitos con alta remuneración en Alemania e Italia
Para llevar cabo sus planes de crecimiento, el Santander ha constituido en Alemania una nueva filial que operará exclusivamente a distancia. Se trata de Suresse Direkt, que abona un 1,7% por una cuenta tradicional y un 2% por un depósitos a doce meses, que es el vencimiento más habitual en las contrataciones.
La intención del grupo es captar dinero y usuarios con los que fondear la financiación de su con firma de créditos al consumo en Europa y afianzar su presencia en Alemania, donde ya opera con Openbank y la franquicia de préstamos para coches y otros bienes.
En España, aunque el banco se niega a abonar rentabilidades atractivas a los clientes por los depósitos, es uno de los grupos que mejor retribuye. Lo hace a través de Openbank, que desde hace unas semanas paga un 1% con la contratación de una cuenta sin necesidad de vinculación. Las mejores ofertas del mercado en nuestro país superan ya el 2% en el mejor de los casos, pero son ofrecidas por entidades de pequeño tamaño que buscan crecer en el nuevo escenario de tipos de interés.
Por su parte, BBVA también ofrece un 2% por un depósito a un año en Italia, un mercado en el que desembarcó el año pasado y, según sus propias cifras, tiene en la actualidad 160.000 clientes, muy por encima de lo previsto inicialmente. La intención del grupo con sede en Bilbao es acelerar el negocio en el país transalpino, donde opera únicamente a través de internet, y explorar otros territorios para adentrarse de la misma manera.
En España, por contra, su política pasa por no incrementar el interés de los depósitos ni las cuentas. BBVA ofrece en estos momentos una imposición a plazo con un tipo de 0,65%, pero en la que el cliente tiene que contratar un fondo de inversión para obtener dicha rentabilidad.
Pese a las reprimendas del BCE para que los bancos no solo incrementen el coste de los créditos, sino que eleven la remuneración del pasivo, las grandes entidades han decidido esperar un tiempo en España para aumentar los pagos por el dinero de los usuarios. Con ello, el interés medio que abonan las entidades a los clientes particulares por los depósitos a plazo ha pasado del 0,10% de agosto al 0,34% de octubre. Para periodos de vencimiento de hasta doce meses, el más común, esta retribución se queda en el 0,29% frente al 0,01%. Eso sí, los bancos siguen siendo más generosos con las empresas, a las que pagan hasta un 0,73% por su liquidez.
En las cuentas a la vista, que es donde las familias colocan sus ahorros de una manera mayoritaria, el tipo de interés que desembolsa el sector financiero se mantiene sin cambios en el simbólico 0,02%, incluyendo todo tipo de comisiones y gastos asociados.
Por el contrario, los bancos, entre ellos Santander y BBVA, sí están transfiriendo con rapidez el alza del euríbor a los créditos, a diferencia de lo que hacen con los depósitos. Y, por ejemplo, han encarecido hasta el 4,51% el interés que piden a los autónomos y las pequeñas empresas por la financiación y hasta un 2,63% a los particulares por las hipotecas.
