ISFG: el nuevo impuesto que tendrán que pagar los españoles en 2023
Los Presupuestos Generales del Estado también contemplan un cambio en la prestación por desempleo
Una casa grande | Pixabay
La conocida como tasa sobre las grandes fortunas, es decir, el Impuesto de solidaridad a las grandes fortunas (ISFG) ya ha entrado en vigor. Es un tributo que el Estado ha aprobado de cara a este y el próximo ejercicio económico con el objetivo de aumentar la recaudación de las arcas públicas. Al mismo tiempo, evitan que algunos de los propietarios de este tipo de patrimonios se evadan de pagar este tipo de tasas dadas las bonificaciones que han puesto algunas comunidades autónomas.
El impuesto afectará a las fortunas netas de más de tres millones de euros. No obstante, hay establecidas distintas cuotas en función del total de patrimonio. A quienes posean una cantidad de entre tres y cinco millones de euros les corresponde un impuesto del 1,7% anual; en caso de tener entre cinco y 10 millones, el porcentaje sube hasta el 2,1%; por último, para las fortunas más grandes el tributo es de un 3,5%.
Esta medida choca con otro impuesto: el de patrimonio (IP). Este también va según la riqueza acumulada y continuará. Sin embargo, aunque ambos impuestos van a coexistir esto no implica que quienes estén dentro de la horquilla tengan que pagar ambos. La norma del ISFG establece que todo lo que la persona pague por el impuesto de patrimonio se le restará de la cuota del nuevo impuesto.
Comunidades a las que afecta
El impuesto sobre el patrimonio es una competencia de cada comunidad autónoma; el nuevo tributo, por el contrario, depende del Ejecutivo central. Es una medida, además, que busca acabar con las bonificaciones que algunas autonomías han creado sobre el IP, por lo que la cuota a pagar por el ISFG sí que puede variar de una comunidad a otra.
De esta forma, quienes tengan patrimonios superiores a los tres millones de euros y residan en la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Aragón, La Rioja, Castilla y León, Extremadura y Canarias estarán exentos de este pago. Esto es porque en estas regiones ya existen unas imposiciones que son iguales o superiores en los distintos tramos de patrimonio que ha considerado el Gobierno de España.
No obstante, tanto en Madrid como en Andalucía existe una deducción equivalente de la cuota, por lo que sus habitantes sí que deberán pagar este Impuesto solidario. En Galicia ocurre algo parecido a esta situación, ya que también existe una bonificación sobre la cuota. Por último, también afectará a los propietarios de las fortunas por encima del límite establecido en Baleares, Cataluña, Cantabria, Murcia y Asturias. En País Vasco y Navarra, donde se sigue aplicando la política foral, ocurrirá lo mismo.
Por el momento, esta es una medida temporal cuya recaudación de impuestos irá destinada de forma «íntegra» a la financiación de «las ayudas que ayuden a paliar la situación de las familias con motivo de la subida de precios, como el transporte gratuito, la bajada del IVA de la luz o el gas», explicó la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.
Otras novedades para este año contempladas en los PGE
Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) también contempla una mejora en las prestaciones por desempleo que beneficiará a unas 300.000 personas. Concretamente, establece que esta volverá a ser del 60% a partir del séptimo mes (antes era de un 50%); esto supondrá un aumento de unos 100 euros de media para las personas que sigan cobrando el despido después de los primeros 180 días.
Además, el Ministerio de Trabajo tiene aún dos frentes abiertos: la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y la aprobación del Estatuto del Becario. Aún continúan las negociaciones en ambos casos para alcanzar un acuerdo con la patronal, los sindicatos y los agentes sociales.
