Lidl no despedirá a la trabajadora acusada de transfobia en Málaga
La trabajadora sufrió un ataque de ansiedad tras conocer que podría perder su empleo
La cadena alemana de supermercados Lidl no despedirá a la supervisora de una de sus tiendas en Málaga que fue acusada de transfobia, tal y como aseguran desde la compañía a THE OBJECTIVE. La trabajadora llamó «caballero» a la presidenta de la asociación Trans Huellas. Fue la propia asociación la que, a través de las redes sociales, denunció un ataque tránsfobo en un supermercado de la ciudad.
Según ha explicado la afectada, Cristina Alias, a la Cadena Ser, «desde un primer momento le he dicho que soy una mujer… pues luego ha insistido llamándome ‘caballero’ y así hasta que me ha acompañado a la salida del local donde me iba pidiendo disculpas pero llamándome ‘caballero’», ha asegurado Alias a la emisora.
La trabajadora acusada de estos hechos sufrió un «ataque de ansiedad» tras el incidente ocurrido este miércoles, según aseguran a THE OBJECTIVE fuentes sindicales. Según apuntan estas mismas fuentes, la supervisora «se confundió, pero le pidió disculpas inmediatamente». En este momento, tal y como relatan a este diario, la trabajadora de la cadena alemana «lo está pasando bastante mal, no era su intención molestar a nadie». Tanto es así que «la empresa le ha dado varios días de permiso retribuido porque tiene un ataque de ansiedad ya que se ha presentado la prensa en la tienda», aseguran estas fuentes.
No será despedida
En un primer momento, se apuntó la posibilidad de que la trabajadora fuera sancionada por estos hechos. Desde CCOO han pedido a la compañía «prudencia» en la investigación sobre la situación. Desde la compañía, aseguran que «ante todo Lidl respeta el derecho de todas las personas a sentirse y expresarse libremente».
Prueba de ello, defienden desde la compañía, es su «Plan de Igualdad, a través del que trabajamos firmemente para garantizar la igualdad de trato y de oportunidades y la no discriminación en ninguna de sus formas».
No obstante, desde la cadena alemana señalan que «en este caso en concreto, se trata de un error no intencionado» por parte de una de sus empleadas que, «rápidamente, pidió disculpas». Igualmente, la dirección de Lidl en Andalucía ya se ha puesto en contacto con la clienta para disculparse y explicarle que se trató de un error humano. Al tiempo, la compañía asegura que «desde Lidl no se van a tomar medidas sancionadoras contra la empleada».
Vox defiende a la trabajadora
El altercado en este supermercado de Málaga ha tenido una fuerte repercusión en las redes sociales. En este sentido, VOX se ha pronunciado para defender a la empleada del Lidl y pedir explicaciones al supermercado si acaba siendo sancionada. Además, se han erigido como «el único partido que defiende a las mujeres» frente a unos «lobbies» que han tildado de «disparatados, misóginos y subvencionados».
También se ha pronunciado el sindicato Solidaridad, afín al partido, para anunciar que, si es necesario, defenderán a esa trabajadora de forma gratuita para que mantenga su puesto de trabajo. Finalmente, tal y como aseguran desde la compañía a este diario, la trabajadora no será sancionada de ninguna forma al considerar desde el supermercado que se trata de un error puntual.