Telefónica convoca a UGT y CCOO para empezar a negociar el nuevo convenio colectivo
La empresa prevé poner sobre la mesa un plan de suspensión de empleo (PSI) que afectaría a 2.500 empleados
Sede de Telefónica en Madrid. | Agencias.
La dirección de Telefónica ha convocado para este jueves a las 16:00 a los sindicatos mayoritarios, UGT y CCOO, para iniciar la negociación del III Convenio Colectivo de Empresas Vinculadas. Se espera que dentro de estas conversaciones (no en esta primera reunión) se aborde el proyecto de la operadora de poner en marcha un nuevo plan de suspensión de empleo (PSI) con el que prevé ofrecer salidas a unos 5.000 trabajadores, pero del que espera una aceptación de unas 2.000 a 2.500 personas.
CCOO y UGT enviaron este martes una carta a Telefónica para que se abriese esta mesa negociadora «como vía para dotarnos de garantías y seguridad sobre las condiciones laborales de las personas que componemos Telefónica en España». Los dos sindicatos mayoritarios han hecho esta petición una semana después del Investor Day en el que la operadora confirmó que trabaja en un plan de ajustes para su plantilla en España. Una respuesta que se produjo a primera hora de la tarde.
UGT y CCOO consideran que, habiendo pasado un tiempo prudencial desde la celebración del Capital Markets Day «la empresa debe clarificar qué afectación podría tener el plan estratégico presentado para las personas trabajadoras». «Mensajes como «obtención de eficiencias que ayuden a reducir la estructura de costes» o «right-sizing the organization» se suman a la incertidumbre existente por la regulación del sector, la entrada de nuevos accionistas o las fusiones de empresas existentes y su posible afectación al mercado», han agregado.
Plantilla afectada
«Por ello, UGT y CCOO hemos reclamado la apertura urgente de la mesa negociadora para dar inicio a la negociación del III Convenio Colectivo de Empresas Vinculadas de forma inmediata, considerando que dicho foro es el ideal para ejercer el diálogo social que ambas partes hemos desplegado durante décadas», concluyen.
Precisamente en su reunión con los analistas, el consejero delegado Ángel Vilá indicó que en los próximos días se acercarían a los sindicatos para comenzar a negociar, pero hasta la fecha estos acercamientos no se han producido formalmente.
A finales de octubre se conoció que Telefónica ultimaba la presentación de un nuevo plan de bajas incentivadas para reducir la plantilla en unas 2.500 personas de un universo potencial de 5.000 empleados en España. En principio, las condiciones serían similares a las presentadas en los tres anteriores procesos que se han sucedido en la compañía desde 2015.
En los últimos nueve años han salido de la operadora unos 12.000 empleados bajo esta modalidad denominada Plan de Suspensión del Empleo (PSI), que sustituye los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE), con salidas incentivadas que hacen menos traumática la reducción de plantilla. En 2015, antes de la aplicación del primer PSI había unos 33.000 empleados en Telefónica España a través de tres sociedades: Telefónica de España SAU, Telefónica Móviles y Telefónica Soluciones.
Nuevo PSI
Se se cumplen los objetivos del nuevo PSI se quedarán unos 18.000 trabajadores, lo que supone reducir la plantilla entre un 43% y un 45% en solo nueve años. En total, se han registrado cuatro PSI desde entonces: 2015, 2019, 2021 y ahora 2023. Anteriormente, la operadora venía realizando ERE, a los que entre 2003 y 2007 se adhirieron 13.870 empleados, mientras que entre 2011 y 2013 acarreó el despido de 6.830 trabajadores.
En cuanto a los afectados por este PSI, generalmente incluye a trabajadores por encima de los 54 años cumplidos y una antigüedad de 15 años en la empresa, al momento de firmarse el plan, unas 5.000 personas este año. Sin embargo, el objetivo es que se apunten no más de 2.500 personas. En 2021 el plan de bajas afectó a los nacidos con anterioridad a 1967.
Posición de Telefónica
Telefónica tendrá que provisionar al menos 1.100 millones de euros en sus cuentas en España para poner en marcha su nuevo plan de bajas incentivadas (PSI), según las estimaciones de fuentes sindicales a este diario. La idea de la empresa es hacer una afectación escalonada de esta provisión durante los tres años que fue el plan y el objetivo es también ligarlo a la negociación del nuevo convenio colectivo.
En todo caso hay coincidencia entre trabajadores, sindicatos y empresa de que el PSI es la mejor solución para ajustar las dimensiones de la plantilla.En los sindicatos aseguran que siempre que las salidas no sean forzadas, y las condiciones sean buenas, no se opondrán. Y por el lado de la plantilla existe unanimidad en que todos los que estén en edad de acogerse, se plantearán el plan de bajas como una forma atractiva de salir de la compañía.
Del lado de la compañía, es la mejor manera de recortar costes laborales evitando conflictividad social y sin tener que recurrir a un ERE. Las cuentas que hace Telefónica indican que tras ejecutarse el plan, la operadora podría obtener importantes sinergias. En el plan de 2021 calcularon 200 millones extra a sus resultados operativos brutos (Ebitda) del 2022 en España. Este aumento provino fundamentalmente del ahorro que se produjo con la salida de los empleados que se llevaban la parte más elevada de la masa salarial.
