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Caixabank deja claro que se queda en Valencia y que no trasladará la sede a Cataluña

El presidente destaca la vocación de permanencia de la entidad en la ciudad levantina y que la situación no ha cambiado

Caixabank deja claro que se queda en Valencia y que no trasladará la sede a Cataluña

El presidente de Caixabank, José Ignacio Goirigolzarri. | Europa Press

Caixabank ha dejado claro este viernes que no trasladará su sede de Valencia a Cataluña, a pesar de las presiones de los partidos independentistas, entre ellos Junts, que quieren promover la vuelta de las empresas que se fugaron por el 1-0. La entidad es una de las más importantes y por tanto su vuelta sería fundamental para desencadenar un efecto arrastre al resto.

El presidente del grupo financiero, José Ignacio Goirigolzarri, ha manifestado que «estamos mejor en Valencia porque estamos en Valencia y porque nos parece un lugar equilibrado que cualquier otro no reúne las condiciones de origen del banco».

En este sentido, ha explicado que cuando se produjo la integración de Bankia, ambos tenían la sede en Valencia. Entonces, ha explicado Goirigolzarri, que «el consejo se reflexionó sobre la sede y se decidió «que continuábamos así, no por inseguridad jurídica, sino porque era lo mejor para los accionistas y los depositantes y con carácter de permanencia». «Eso no ha cambiado y pensamos lo mismo que entonces». ha remarcado.

El presidente de Caixabank ha añadido que «este tema ha sido muy analizado por el consejo» y ha valorado que «estamos muy felices y a gusto aquí». Además. ha negado cualquier tipo de presiones para que esta posición cambie, al igual que ha señalado que el banco no ha participado en ningún tipo de conversación para abordar este asunto.

Este mensaje ha sido lanzado por el banquero durante la presentación de resultados de Caixabank de 2023, junto al consejero delegado, Gonzalo Gortázar, acto en el que también se ha pronunciado sobre otros temas que están en ambiente económico y político. Uno de ellos ha sido la vuelta del Estado al capital de Telefónica, operadora de la que el banco tiene de manera directa un 3,5% y su matriz, La Caixa, otro 2,6% a través de Criteria.

Los directivos de la entidad han destacado que se sienten «cómodos» con la nueva situación, dando a entender que no se van a desprender de las acciones, y que «Telefónica es muy atractiva, por lo que no es de extrañar que reciba el interés de los inversores».

Sobre el impuesto extraordinario, los máximos responsables de Caixabank no fueron muy beligerantes como el resto de banqueros en los últimos días. El sector ha suavizado por completo sus atraques al Ejecutivo. Tan solo Goirigolzarri ha sostenido que la mejor manera de abordar el gravamen es «eliminarlo».

En cuanto a la entidad, los dos directivos se han mostrado muy confiados en la buena evolución de la entidad para este año, aunque los tipos de interés hayan empezado a moderarse, y han asegurado que Caixabank mantendrá la rentabilidad en los niveles de 2023.

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