Aragonés saluda al Rey a su llegada al Mobile en un plantón descafeinado y sin Collboni
El presidente de la Generalitat no recibió al monarca en su llegada aunque no pudo evitar que se les fotografiara juntos
El desplante del presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, al Rey Felipe VI se ha quedado a medias. El también líder de ERC ha vuelto a ausentarse del tradicional recibimiento al monarca en la jornada inaugural del Mobile World Congress (MWC) que esta semana se desarrolla en Barcelona, pero minutos después le ha saludado de manera cordial antes del comienzo de la primera charla del evento. Evitó la foto del recibimiento, pero minutos después fue retratado mientras estrechaba la mano al Jefe de Estado.
La situación ha sido similar a la del domingo durante la cena oficial de la feria en la que cuando el presidente de la Generalitat volvió a esquivar el saludo al jefe del Estado, pero luego compartió mesa con él durante la cena inaugural del MWC. Sin embargo, en esta oportunidad ha estado solo en su desplante, ya que el alcalde de Barcelona, el socialista Jaume Collboni ha estado en todo momento formando parte de los actos protocolarios, a diferencia de su antecesora, Ada Colau, que nunca saludó al Rey.
La tradicional llegada del Rey a la Fira de Barcelona en el primer día de MWC estuvo presidida por Pedro Sánchez y sus ministros de Industria, el catalán Jordi Hereu, y el de Transformación Digital, José Luis Escrivá, seguido de Collboni y los representantes de Mobile World Capital y la patronal organizadora, GSMA. Posteriormente, se dirigieron a la jornada inaugural en la que los principales directivos del sector dieron la bienvenida a los asistentes y ahí es donde Felipe VI ha coincidido con Aragonés, quien le ha estrechado la mano de manera cordial.
Visita a los ‘stands’
El presidente de la Generalitat ha entrado al recinto antes de la llegada del Rey sin esperar a recibirle, pero no ha dudado en saludarle. Una situación que refleja que la hostilidad de años anteriores se ha moderado y ha dejado paso a una situación en la que Aragonés sigue haciendo los plantones para evitar una foto oficial con el Rey, pero en la que a la vez participa activamente en los actos en los que coinciden e incluso donde pueden llegar a sentarse juntos.
Posteriormente, y como ya es tradicional, Aragonés tampoco acompañó al Rey y a Pedro Sánchez en su visita por los principales stands de la feria. El año pasado, Aragonés y Colau también evitaron al Rey, aunque tampoco pudieron evitar una foto de familia final con todas las autoridades en la que posaron aunque no de buena gana.
Unos movimientos que se producen en el marco de una situación política muy tensa en Cataluña. En estos momentos, el PSOE negocia con Junts la Ley de Amnistía después de que el propio partido catalán liderado por Carles Puigdemont desde el extranjero, tumbase la normativa porque consideró que no era lo suficientemente ambiciosa para sus intereses. Una situación que se ha criticado desde el resto de sectores políticos.
Aragonés y ERC
Sin embargo, ERC y Aragonés han intentado marcar distancias con Junts indicando que la actual Ley como se ha redactado ya es positiva y que puede ser favorable para la convivencia de Cataluña con España. Tampoco han ocultado en los últimos meses su discrepancia con el partido al que arrebataron la Generalitat en las pasadas elecciones de Cataluña, pese al triunfo en los comicios del PSC.
El Mobile de este 2024 espera recibir unos 95.000 asistentes de más de 200 países, según indicó la organización recientemente. Pasado el impacto de la pandemia y tras asegurar su presencia en Barcelona hasta 2030 (con renovaciones anuales automáticas), atrás quedan los líos del procés y los riesgos de que se marchase a otra ciudad, algo que da tranquilidad a la organización para comenzar a volver a la normalidad.
Con todo, de momento siguen sin alcanzar su máximo histórico alcanzado en 2019 con 109.000 asistentes y un impacto económico de 470 millones, aunque en esta oportunidad se espera superar los 461 millones registrados el año pasado. El evento ocupará los ocho pabellones del recinto de Gran Vía de Fira de Barcelona en L’Hospitalet de Llobregat, reunirá a más de 2.400 compañías expositoras y a unos 1.100 ponentes. Generará más de 9.100 puestos de trabajo temporal y dará trabajo a 1.200 empresas logísticas.