THE OBJECTIVE
Economía

La inversión extranjera continuará su tendencia negativa en 2024 tras nueve meses de caídas

La inestabilidad política y la imposibilidad de legislar en materias económicas mantendrá el frenazo del capital foráneo

La inversión extranjera continuará su tendencia negativa en 2024 tras nueve meses de caídas

El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, en una reciente sesión en el Senado. | Agencias.

La inversión extranjera en España continuará su senda descendente al menos durante la primera parte del año. Representantes de fondos, asesores e inversores confirman a THE OBJECTIVE su pesimismo respecto del comportamiento de la entrada de capital foráneo en la economía y advierten de que la inestabilidad política y la incapacidad del actual Gobierno de coalición para sacar adelante medidas de carácter económico, terminarán pasando factura en un curso marcado además por el retroceso en el crecimiento de nuestros principales socios inversores.

Esto supone que se mantendrá la tendencia a la baja que se ha acentuado a partir de abril del año pasado y que terminó hundiendo un 18% la inversión extranjera bruta en España en 2023 en términos interanuales. Los datos de la Secretaría de Estado de Comercio indican que este indicador lleva al menos nueve meses registrando caídas en relación a 2022, con un desplome del 74% en el segundo trimestre, un retroceso del 19,3% entre julio y septiembre y una caída del 9,7% en el cuarto trimestre.

La sensación que hay entre los inversores es que se seguirán produciendo cifras negativas al menos en este primer trimestre (influenciado también por la elevada base comparativa de 2023) y que podrían seguir hasta el verano si es que se mantiene la actual parálisis institucional en la que el Gobierno ha renunciado a presentar los Presupuestos Generales del Estado para este año.

Fondos europeos

La parálisis institucional es uno de los factores que más ahuyenta la inversión extranjera y suele frenar proyectos de compañías extranjeras o dejar en el aire eventuales compras de empresas españolas. Desde diferentes sectores económicos ya han advertido que iniciativas de este tipo pueden quedar paralizadas sin Presupuestos Generales del Estado, mientras que el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha dicho que «la inversión se parará».

Del mismo modo, muchos inversores con los que ha hablado este diario advierten de un parón aún mayor de grandes proyectos relacionados con fondos europeos Next Generation. La ejecución cerró el año pasado con el peor dato desde que existe el Plan de Recuperación y Resiliencia, tras realizar pagos por solo el 25% de lo presupuestado para 2023, y en el caso de este curso los problemas para sacar adelante los PGE y leyes económicas, podrían llevar a que la ejecución pueda ser incluso peor.

Por otro lado, la sucesión de elecciones que se producirán en la primera parte del año también atenta contra la estabilidad de la inversión. En abril se producirán comicios en el País Vasco, en mayo en Cataluña y en junio en el Parlamento europeo, una situación similar a la producida en 2023 con municipales en mayo y generales en julio. Todo ello con el consiguiente efecto negativo sobre el capital, que suele desembarcar en sitios donde hay certidumbre política.

Inversión en 2022

Esta situación de inestabilidad se prolongó incluso después de las elecciones generales por la dificultad para formar Gobierno, primero para Alberto Núñez Feijóo y luego para Pedro Sánchez. Durante los tres meses que se prolongó la investidura -que se produjo finalmente a mediados de noviembre- se registraron los peores datos de inversión para un cuarto trimestre desde el año 2019. En total, 9.549 millones que solo mejoran a los 7.509 millones que ingresaron a España de octubre a diciembre de 2019.

Estos datos anticipan que este 2024 puede producirse una caída similar debido a la inestabilidad política que podría hacerse permanente tras las elecciones. Si a esto se le suma la imposibilidad de Pedro Sánchez de lograr acuerdos duraderos en el Congreso para sacar adelante reformas económicas, «el parón inversor está garantizado», indican estas mismas fuentes.

El otro gran problema que se detecta es la composición de la inversión extranjera que llegó a España en 2023: la distribución por sectores fue de un 54,3% correspondiente al sector servicios, el 42,2% al sector industrial y el 3% a la construcción, lo que supone que la mayoría del dinero que desembarca en el país lo hace ajeno al brazo productivo que deberían ser el motor del crecimiento económico.

Frenazo mundial

¿Y qué pasará en el futuro más inmediato? Los inversores consultados coinciden en señalar que mientras se mantenga la actual inseguridad parlamentaria será muy difícil que la inversión extranjera levante cabeza y advierten que será muy difícil volver a las cifras del año 2022. Un año que estuvo muy influenciado por la boyante situación económica tras la pandemia, asociada a unos tipos de interés en negativo y a un boom del apetito inversor en todo el mundo. 

El actual escenario es radicalmente opuesto, tanto a nivel interno como internacional. Los principales países inversores del mundo, como Alemania, Francia o Estados Unidos atraviesan por problemas económicos y políticos que hacen prever que este 2023 se pueda producir una importante ralentización del PIB en todo el mundo y se mantenga la inestabilidad inversora mundial.

Si a esto se le suma la inestabilidad política local y un relato contrario a las empresas -según denuncian grandes compañías y patronales– se constituye un peligroso cóctel contrario a la vuelta de los flujos de inversión. Un entorno negativo que se refuerza si consideramos la caída de la inversión privada en nuestro país, de más de 12 puntos desde 2019, mientras que la inversión pública se ha llegado a estirar hasta un 30%. Es decir, que además del capital extranjero, el capital español también está en retroceso.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D