El Gobierno aprueba el trámite para gravar a los sueldos más altos con un tributo de solidaridad
La cotización será de alrededor del 1% en 2025 e irá aumentando a un ritmo de 0,25 puntos por año
El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un Real Decreto que, entre otras medidas, incorpora el desarrollo reglamentario necesario para aplicar, desde 2025, la cotización de solidaridad que estableció la última reforma de pensiones para los salarios más altos que excedan de la base máxima, según ha informado el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en una nota de prensa.
Esta medida se desplegará gradualmente. La cotización será de alredecor del 1% en 2025 e irá aumentando a un ritmo de 0,25 puntos por año hasta llegar a cerca del 6% en 2045 (5% a cargo de la empresa y 1% a cargo del trabajador).
Según la reforma de pensiones aprobada hace un año, esta cuota se aplicará por tramos salariales hasta 2045. Al final de este periodo, el tipo de cotización será del 5,5% para los que tengan un salario comprendido entre la base máxima y un 10% más; del 6% para los salarios que superen la base máxima entre un 10% y un 50%; y del 7% cuando el salario sobrepase la base máxima en un 50%. Esta cuota solidaria no se aplicará a trabajadores autónomos.
La norma aprobada hoy en el Consejo de Ministros clarifica además varios procedimientos de gestión en el ámbito de la Seguridad Social para dar una mayor seguridad jurídica a los ciudadanos.
Así, según el contenido del Real Decreto aprobado, la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS) amplía hasta el 30 de junio el plazo para que los trabajadores autónomos societarios comuniquen ciertos datos sobre su actividad, necesarios en el nuevo sistema de cotización en función de ingresos reales del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), en vigor desde el año pasado.
Entre dichos datos a comunicar se encuentran la razón social y el número de identificación fiscal de la sociedad o comunidad de bienes de la que formen parte el trabajador por cuenta propia; si desempeña el cargo de consejero o administrador o prestación de otros servicios para la sociedad; su porcentaje de participación en el capital social; nombre y apellidos y número del DNI o equivalente de los familiares con los que conviva el trabajador autónomo; número de identificación fiscal del cliente del que dependan económicamente; el colegio profesional en el que deban figurar incorporados, y el número de identificación fiscal de la empresa o empresas para las que se presten actividades complementarias privadas.
Asimismo, el Real Decreto aprobado este martes modifica el Reglamento General de Recaudación para clarificar las condiciones del fraccionamiento en el reintegro de las prestaciones indebidamente percibidas, con un importe mínimo de 100 euros mensuales y hasta un máximo de cinco años.
También se extiende la obligatoriedad de la domiciliación bancaria en el pago de las cuotas a los trabajadores del Sistema Especial para Trabajadores por Cuenta Ajena Agrarios, en el periodo de inactividad, y para los trabajadores con convenios especiales con la Seguridad Social. Esto permitirá una mayor seguridad jurídica para estos trabajadores, según el Ministerio.
Me encanta el lenguaje orwelliano, entonces, si es solidario, puedo decidir si contribuyo o no? Puedo elegir con cuánto contribuyo? Si no es así, NO es SOLIDARIO
Efectivamente. Oximorónicamente orwelliano al 200 %. Son unos máquinas del Newspeak. Un «tributo» es un impuesto, o sea una «imposición», una «coerción» ( o pagas o ya sabes). En cambio, un acto «solidario» es, o debería ser, una de las muchas maneras en las que nuestra libre voluntad se expresa. Combinar «imposición» con «libre albedrío», como lo de soplar y sorber a la vez, pues como que no puede ser. ¡ Ah, pero queda guay, y progresista, y chiripedrofláutico !…Bueno: supongo que para el consumo doméstico no deja de tener un cierto efecto estupefaciente y adormecedor ( de eso se trata, claro) aunque sus efectos secundarios nocivos, una vez que se disipan las visiones y la dura realidad se impone, suelen dejar secuelas entre los pacientes aquejados de algún espasmo residual de espíritu crítico y libertad de pensamiento. Pues a no pensar demasiado: es malo para echar una buena siesta y, además, se cae el pelo. O eso dicen por ahí.
Gracias a eso pueden comprar mascarillas fake y quedarse con el dinero, pagar rescates a empresas con un avión porque son estratégicas, pueden comprar Telefónica al precio que sea, pueden pagarle a Junqueras sus cinco votos, pueden fichar a Broncano por 15 millones al año. El impuesto está justificado.
Solidaridad con Koldo y Begoña, claro