Hacienda recauda un 30% más desde que Sánchez gobierna con 62 subidas de impuestos
Pese a ello, el déficit público ha seguido incrementándose en el último registro del Instituto Nacional de Estadística
Pedro Sánchez y María Jesús Montero. | Jesús Hellín / Europa Press
El Gobierno de Pedro Sánchez recaudó en el año 2023 271.935 millones de euros, hasta un 30% más del dinero que recaudó en 2018. Este último fue el año en el que Rajoy abandonó el Ejecutivo por causa de la moción de censura, al tiempo que el líder socialista llegaba al Palacio de La Moncloa.
Esta cantidad supone 63.000 millones de euros más, acompañada de deducciones fiscales por causa de la pandemia, pero también plantea 62 nuevas figuras impositivas, más allá del efecto que la inflación y la no deflactación del IRPF haya podido tener sobre recaudación tributaria total.
Con datos de la AEAT, el IRPF ha sido el tributo que más crecido sobre el resto de figuras fiscales, pasando de 82.859 millones de euros a 120.280 millones, con un incremento porcentual del 45,16%. Le ha seguido el impuesto de Sociedades, con una subida de 10.222 millones de euros de 2018 a 2023, lo que traducido en términos porcentuales supone un 41,15%.
El IVA ha sido el otro gran impuesto que también ha experimentado un repunte considerable. Con 82.859 millones de euros recaudados en 2018, esta figura ha llegado a crecer hasta un 19,40%, con una recaudación en 2023 de 13.634 millones de euros más que en 2018.
Los efectos de no deflactar
La razón de este incremento, explican los economistas consultados, podría responder en parte al crecimiento del PIB de 2018 a 2023, y también al del empleo, que ha pasado de los 19.024.165 millones de afiliados de 2018 a los 20.774.625 millones de 2023. Sin embargo -añaden estas fuentes-, esa cifra chocaría con la recaudación que viene del IRPF, que es prácticamente el 60% de toda la recaudación de este periodo estudiado. Si bien el empleo creció un 9,20%, ese parámetro se distancia mucho del 30% de aumento de la recaudación por IRPF, de manera que ese aumento se debería, en buena medida, a la no deflactación del IRPF.
El economista Diego Barceló Larrán abunda en ello. Afirma que desde que gobierna Pedro Sánchez, la presión tributaria se ha visto aumentada en unos 67.000 millones de euros más, dañando especialmente al sector privado. Lo que es peor, «esa presión no ha conseguido mitigar el déficit público, como los datos del INE corroboraron este lunes, ni tampoco ha mejorado los servicios públicos, mientras en España no deja de crecer el absentismo y las listas de espera no paran de hacer lo mismo».
Esta presión fiscal -tasas, impuestos y cotizaciones- es la que más ha crecido en Europa estos últimos años. Ha venido de la mano de la no deflactación del IRPF -afirman otros expertos- y también de las subidas de las cotizaciones sociales, del incremento de hasta 62 subidas de impuestos, incluyendo nuevas figuras como el impuesto a las grandes fortunas, a los bancos, la tasa Google y la tasa a los plásticos, entre otros. En definitiva, alrededor de 40.000 millones de euros en subidas de impuestos directas e indirectas por la inflación.
Un cheque para los vulnerables
En este contexto, el Partido Popular ha formulado la propuesta de un cheque de 200 euros para aquellas familias que sean vulnerables. Un cheque que podría llegar a las familias de forma automática con ayudas directas. Según fuentes del partido que dirige Alberto Núñez Feijóo, vendría a restituir la pérdida de poder adquisitivo de las familias españolas más necesitadas.
Recientemente, Pedro Sánchez anunció una subida progresiva que propicie «que haya más autobuses públicos y, por tanto, más transporte público y menos lamborghinis». Cabe recordar que, desde este martes, la rebaja del IVA del aceite de oliva y de los alimentos básicos decae y se fija en el 2% hasta diciembre. Según cálculos de los populares, el precio de los alimentos se ha incrementado más de un 35%. Es decir, más de un tercio desde que gobierna Sánchez, mientras los españoles hemos perdido cinco puntos de poder adquisitivo y tenemos la misma renta per cápita que hace 15 años.
