El eje Telefónica-Criteria será la clave para la resurrección económica de Cataluña
Illa presenta un plan de inversión de 18.500 millones hasta 2030 para recuperar el liderazgo económico de la región

El presidente de la Generalitat de Catalunya, Salvador Illa, ofrece una rueda de prensa. | Alejandro Martínez Vélez / Europa Press
El futuro económico de Cataluña pasa por el apoyo que en los próximos años brinden Telefónica y Criteria Caixa, la mayor tecnológica de España y el inversor más importante en cotizadas con una cartera que incluye a Naturgy, Colonial, La Caixa, Puig y ACS, entre otras. De hecho, fuentes consultadas por THE OBJECTIVE creen que el plan económico presentado este viernes por el president de la Generalitat, Salvador Illa, tiene como sus principales destinatarios a estos dos gigantes del Ibex. ¿El objetivo? Que todas las empresas vuelvan. Pero, para ello, antes hay que generar el entorno adecuado y que las grandes corporaciones recuperen la confianza.
En el Govern están convencidos del efecto tractor que tienen Telefónica y Criteria y de la fuerza que podrían generar si participan en estos planes de inversión y en la normalización institucional de Cataluña. Este diario ya publicó hace unas semanas que la conexión catalana fue muy importante para que el Gobierno finalmente tomase el control de la operadora de telecomunicaciones, situando a Marc Murtra, un histórico del PSC y hombre de confianza de Illa, como presidente de la operadora en sustitución de José María Álvarez Pallete.
Un movimiento con una doble vertiente: la primera es que el PSC sirvió de avanzadilla para convencer a Criteria (dueña del 10% de Telefónica), a su presidente Isidro Fainé y a su consejero delegado, Ángel Simón, de que era necesario un cambio de rumbo. Un pacto que allana la colaboración entre el gigante catalán (con sede actualmente en Valencia) y los planes económicos del Ejecutivo central de Pedro Sánchez y de la Generalitat en manos de los socialistas.
Criteria y Cataluña
La segunda vertiente es que, fruto de este pacto, se abre la puerta a que Telefónica refuerce su filial en Barcelona, comparta contratos en la autonomía y descentralice una compañía ligada a Madrid desde siempre. Se trata de que sea parte de un núcleo de empresas fuertes dentro de Cataluña (sin salir de la capital), pero que genere un polo de atracción para otras grandes corporaciones de los más diversos sectores productivos.
En el caso de Criteria, no hay que convencerles de que hay que invertir en Cataluña. Hablamos de un gigante que se mueve por criterios empresariales y de rentabilidad más que influencias políticas, pero sí que se espera que los dos gobiernos, el central y autonómico, le den garantías suficientes de que hay estabilidad para desarrollar proyectos y que es rentable sumarse a la hoja de ruta de esta resurrección económica catalana planteada por la nueva Generalitat.
Salvador Illa presentó este viernes el plan económico del Govern para la legislatura, llamado ‘Catalunya lidera’, que incluye 200 medidas y una inversión de 18.500 millones de euros hasta 2030 para «recuperar el liderazgo económico de Cataluña». Un acto que contó con la asistencia de Marc Murtra y Ángel Simón en primera fila y con una nutrida representación del Ibex.
Proyectos de inversión
También estuvo el presidente del Banco Sabadell, Josep Oliú, que confirmó su vuelta a Cataluña después de siete años; el vicepresidente de Banco Santander, Juan Manuel Cendoya; el presidente de Aena, Maurici Lucena; el CEO de Agbar, Felipe Campos; el presidente de Enagás, Antonio Llardén; y el presidente de la cementera Molins, Joan Molins, la otra grande que anunció su vuelta a Barcelona. Una convocatoria inusual para un presidente autonómico, pero aún más para uno de Cataluña. Desde que en la pandemia el Ibex se volcó con Pedro Sánchez, ningún político había logrado reunir bajo el mismo techo a tantas empresas y con tanta importancia en el tejido productivo español. Desde luego un voto de confianza para Illa.
El plan de impulso empresarial del que este diario ya adelantó algunas líneas maestras hace unas semanas incluye inversión en infraestructuras, modernización productiva, conocimiento e innovación, buen gobierno y políticas de igualdad de oportunidades. Los proyectos estrella son la transformación del Aeropuerto de Barcelona-El Prat, un corredor entre Tarragona-Lleida-Zaragoza, impulsar la autonomía hídrica, reforzar la red de fibra óptica de titularidad pública hasta los 8.000 kilómetros en 2025 y energía limpia equivalente a 12.000 megavatios de nueva potencia.
El Govern quiere desarrollar también una estrategia sectorial orientada a las tecnologías de uso dual y al refuerzo de la autonomía estratégica y desplegará un plan para impulsar el vehículo eléctrico en Cataluña entre 2025 y 2030. Pondrá en marcha un Clúster de Servicios Financieros, prevé incrementar el número de plazas y ampliar la oferta formativa de titulaciones Stem y en medicina, además de desplegar un programa de transformación tecnológica. Illa también defendió la simplificación normativa y la reforma de la administración.
Plan de Illa
Como ya advirtió este periódico, el president lleva varios meses trabajando en este plan que tiene como objetivo final que las empresas vuelvan a Cataluña. Su proyecto pasa por crear el clima adecuado para dejar atrás los confusos años del procés y del independentismo, para lo que quiere normalizar institucionalmente la relación de la Generalitat con el resto de España, pero también con el tejido productivo. No se trata de obligar a nadie, pero sí de abonar las condiciones y el clima inversor para que todo vuelva a ser como era antes del 1-O.
Y es que las empresas siguen sin volver a Cataluña. En 2024 se produjeron 351 salidas netas, el doble que en 2023 y 5.370 bajas acumuladas desde 2017. Una fuga que se ha acelerado pese a que en agosto Illa llegó a la Generalitat. De hecho, tras los anuncios de Sabadell y Cementos Molins el resto de gigantes del Ibex que se marcharon -con La Caixa a la cabeza- se han apresurado a aclarar que no tienen pensado volver ni cambiar su domicilio por el momento.
Las empresas consultadas por este diario insisten en señalar que la confianza no se genera de un día para otro y que hay que trabajar para normalizar las relaciones. Por ello la Generalitat cree que Telefónica y Criteria son claves para actuar como alicientes para que se produzca este ansiado retorno de la diáspora Y que cuando éste comience a producirse, la economía catalana emprenda esa esperada resurrección que le lleve a igualar su PIB con la Comunidad de Madrid -tras siete años por debajo- y a superar sus pobres datos de PIB per cápita, actualmente en el cuarto lugar de España.