El primer fin de semana sin estado de alarma deja escapadas, reencuentros familiares y botellones
El primer fin de semana completo tras el fin del estado de alarma ha estado marcado por los reencuentros familiares tras meses sin poder hacerlo, las escapadas, ya sea a la costa, a la montaña o al pueblo y algunas escenas de botellones y aglomeraciones.
En contexto: los datos de evolución de la pandemia, la tendencia generalizada, según los datos comunicados por las autoridades sanitarias de las comunidades autónomas, ha seguido siendo a la baja aunque con excepciones. La semana arrancará con nuevos hitos en la vacunación como el avanzado por la Comunidad de Madrid, que empezará a citar para vacunar contra el coronavirus este lunes con dosis de Pfizer, Moderna y Janssen a la población general de 50 a 55 años.
Aunque los incidentes no han sido generalizados, en algunos puntos como la ciudad de Barcelona la noche del sábado se ha saldado con el desalojo de más de 9.000 personas que participaban en concentraciones multitudinarias y botellones.
Según han informado a Efe fuentes del Ayuntamiento de Barcelona, el principal punto de la capital catalana en el que se ha registrado una concentración más masiva ha sido la playa de Sant Miquel, donde los agentes han dispersado a unas 2.000 personas.
En la ciudad de Madrid, que celebra este fin de semana sus fiestas patronales de San Isidro, el Ayuntamiento ha destacado que la celebración ha sido «ejemplar» sin que se hayan producido apenas incidencias destacadas y lejos de las imágenes de aglomeraciones masivas y botellones del pasado fin de semana.
En Salamanca, Pamplona, Aragón o Murcia también se han registrado algunos incidentes como una macrofiesta con 151 personas en una fábrica abandonada en el barrio pamplonés de Echavacoiz o la detención de dos hombres tras una riña al cierre de los bares de una zona de ocio de la capital murciana.
El Gobierno ha insistido en lanzar un mensaje para que la ciudadanía disfrute pero siempre siguiendo las recomendaciones sanitarias, tal y como ha subrayado este domingo, el ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, que ha advertido a los jóvenes que han participado esta noche en grandes aglomeraciones que «deben ir con cuidado».
Un cierto retorno a la normalidad previa a la pandemia que se ha reflejado especialmente en las playas de Levante y en las carreteras: los desplazamientos para salir de Madrid desde el viernes han aumentado un 50% respecto a los que se produjeron la semana anterior y son similares a los que se registraban un fin de semana de mayo anterior a la pandemia, según datos de la Dirección General de Trafico (DGT).
Un incremento que ha obligado a habilitar este domingo por la tarde carriles de sentido contrario al habitual en la autovía de Burgos (A-1), la autovía de Valencia (A-3) y la autovía de Extremadura (A-5), de entrada a Madrid, las tres carreteras con más problemas de tráfico, aunque las complicaciones han afectado a prácticamente todas las vías de salida de la capital.