Elías Ahuja: apareamiento en el colegio mayor
«No hemos nacido ayer como para no saber que señalar mediática y judicialmente a estos chavales solo provocará la reacción contraria»
En esta España nuestra, de dinámicas polarizadoras, cuando el Gobierno instrumentaliza burdamente una polémica hay quienes se posicionan automáticamente en el bando contrario. Esto es lo que ha pasado con el vídeo del Colegio Mayor Elías Ahuja, que muchos han salido en tromba a defender que de machismo nada, ¡que es tradición! Y que todo es una cortina de humo para no hablar de la inflación.
Pero ser conscientes de que la agenda sanchista y sus terminales mediáticas han dado alas a este vídeo para alimentar el bicho del machismo, no debería ser un argumento para escudarse bajo el tópico manido de la tradición. Ni siquiera cuando la Fiscalía, en otra actuación aberrante, decide que investigará un posible delito de odio.
No hemos nacido ayer como para no saber que señalar mediática y judicialmente a estos chavales solo provocará la reacción contraria. Y por eso Vox calla y no cae de cuatro patas en la polémica.
Sin embargo, los que no militamos en partidos políticos e intentamos ser seres autónomos y pensantes, no debemos sucumbir ni a la lógica polarizadora ni al maniqueísmo donde nos quieren meter.
Los cánticos de Ahuja serán machismo o solo mal gusto. Lo que está claro es que son liturgias endogámicas y apolilladas, de unos colectivos muy concretos, que se reproducen y perpetúan en el tiempo. Hay quien lo llama ritual de apareamiento. Y hay también quien se escandaliza más por ello que por el acoso a los jóvenes de S’ha Acabat!.
En el mundo íntimo de las pasiones existe un juego de dominación y sumisión. En especial, entre chavales jóvenes y llenos de testosterona. En el libro biográfico del incancelable Philip Roth, el escritor confiesa con absoluta inocencia que para tener de joven algo parecido al sexo tenía que «utilizar un lado agresivo». Pero añade: «no me refiero a una agresividad desagradable, quiero decir un carácter enérgico».
Así que no seré yo quien niegue este lado de la naturaleza humana. Ni que, en términos evolucionistas, el cántico soez y gregario pueda cosechar algún resultado. Pero qué quieren que les diga, si hay que elegir, yo me quedo con el tango.
¿ Acaso es esta la 1ª vez que pasa algo similar en el siglo XXI o desde 1980 en España ? Y dentro de esa categoría amplia de novatadas, que no es ni mucho menos la peor de botellones desordenados, borracheritas nada criticadas en fiestas populares, donde el tocamiento a la t..a a veces se denuncia y otras no, y se acepta con sonrisa, porque viene de tu colega de toda la vida de tu novio o follamigo…?
Pues entonces, a ver si nos caemos del guindo, y de los que hemos sido jovenes, entonces de izdas o derechas, etc etc «el que esté libre de pecado que tire la primera piedra».
Más de uno de los actuales dedos acusadores seguro que tiraron pedruscos, y con hechos no verbales, frente a lo «verbal» sucedido entre esos dos colegios mayores, de toda la vida, y en comparacion con botellones continuos en campus publicos universitarios, en fiestas molestando a la vecindad, propasandose con la compañera desconocida de al lado, etc etc y aqui paz y allá gloria .
Menos hipocresía y concentremos esfuerzos y energías en asuntos infinitamente más demandantes de solucion real que tantos otros que quedan en un video viral que es pecata minuta frente a los excesos de años, decadas de los que fuera de su vivienda, de su colegio mayor, no son precisamente ejemplares con su comportamiento !
Dejad, rojos asquerosos, que los chicos follen y se diviertan como les salga de sus pelotas o sus almejas. Rojos sarnosos que todo lo queréis manipular.
Una dinámica lamentable de colegial (muy conveniente extirpar, que conste) que escala a lo político.
Ridículo