Paisaje a seis días de la batalla
«Comienza a ser tan claro que la posibilidad de que el PSOE pudiera bloquear la investidura de Feijóo se quedaría en eso, en una remota posibilidad teórica»
A seis días de que los españoles vayamos a las urnas, los datos del votómetro, confeccionado a partir de la media ponderada de las encuestas y trackings elaborados por las 12 principales empresas demoscópicas del país, comienzan a mostrarse tan irreversibles que solo muestran ya dos gobiernos posibles y ambos con Alberto Núñez Feijóo a la cabeza: el primero en solitario y el segundo con la participación de Vox.
El escenario comienza a ser tan claro que en el momento de escribir estas líneas, la posibilidad de que el PSOE pudiera bloquear la investidura de Feijóo, uniendo sus votos a los de toda la galaxia regionalista, nacionalista e independentista, se quedaría en eso, en una remota posibilidad meramente teórica.
Y es que los números de esta última semana no pueden ser más esperanzadores para los populares, ya que no solo han superado el 36% de intención de voto, sino que han ensanchado la brecha con los socialistas más allá de los ocho puntos, lo que les ha permitido sumar seis diputados más al diferencial con estos, que ya se sitúa en 46 diputados, quedándose, además, a escasas décimas de obtener entre ocho y 10 diputados más en las circunscripciones pequeñas y medianas (las que reparten cuatro, cinco y seis diputados) en las que se está centrando la batalla de estas últimas semanas y, en las que unos pocos miles de votos van a decantar un importante número de actas de diputado.
«Una caída que no es más dramática gracias a las transferencias de voto útil que siguen recibiendo desde Sumar cada día»
Los socialistas, lastrados por la pobre actuación de su líder en el debate cara a cara e incomprensiblemente faltos de un plan B en el caso de que esto sucediera, comienzan a perder tracción y se vuelven a situar por debajo del 28%, lo que corta en seco la tímida e incipiente remontada que observamos las pasadas semanas. Una caída que no es más dramática gracias a las transferencias de voto útil que siguen recibiendo desde Sumar cada día.
Un voto útil que no solo está afectando negativamente al partido de Yolanda Díaz, sino que también lo está haciendo, e incluso de forma más evidente, a Vox, que siempre, según los datos del votómetro, perdería hasta la mitad de sus diputados en el congreso.
¿Y qué puede pasar esta última semana en la que la ley nos impide publicar encuestas?
Pues miren, a pesar de que cualquier cosa sea posible en una materia tan volátil como la electoral, si vemos los datos del último bloque de elecciones, este nos muestra -con alguna excepción significativa- que una vez establecida una tendencia sólida en campaña, la última semana antes de acudir a las urnas ésta se acelera de forma notable lo que en el caso en el que nos ocupa significaría no solo que la cota de los 160 diputados estaría al alcance del PP, sino que incluso podrían superar esta cifra, sobre todo si, como parece, la participación se sitúa en torno al 70%.
Y ojo con los supuestos indecisos a cuya salvífica intervención se encomendarán los socialistas durante esta semana: su participación suele favorecer al partido que va por delante en las encuestas.