La ONU pide un acuerdo mundial sobre contaminación que invierta "a lo grande"
El Programa de la ONU para el Medio Ambiente (Pnuma) ha instado este jueves a la firma de un «acuerdo mundial» contra la contaminación que incluya a los sectores público y privado, fomente la producción y el consumo sostenibles, e invierta «a lo grande» en tecnologías ecológicas. El organismo ha presentado el informe ‘Hacia un mundo sin contaminación en Bonn, en el marco de la Cumbre del Clima (COP23).
El Programa de la ONU para el Medio Ambiente (Pnuma) ha instado este jueves a la firma de un «acuerdo mundial« contra la contaminación que incluya a los sectores público y privado, fomente la producción y el consumo sostenibles, e invierta «a lo grande» en tecnologías ecológicas. El organismo ha presentado el informe ‘Hacia un mundo sin contaminación‘ en Bonn, en el marco de la Cumbre del Clima (COP23).
El documento del Pnuma argumenta que se puede fomentar la innovación y contribuir a atajar la contaminación «si se movilizan fondos y se invierte en la promoción de un desarrollo con bajas emisiones de CO2», así como con «una producción y un consumo menos contaminantes«. También considera que «hay que destinar más fondos a la investigación y a la vigilancia sistemática, la gestión y el control de la contaminación y a la infraestructura necesaria para esas tareas».
Decentralised renewables help to improve access to modern energy systems and thereby reduce the need for polluting alternatives.
Do you want to live on a pollution free planet? Act now to #beatpollution https://t.co/dVU25bh5st pic.twitter.com/O6XxeX8Lmy
— UN Environment Programme (@UNEP) November 15, 2017
La agencia medioambiental de la ONU afirma en su informe que «durante demasiado tiempo» se ha considerado que «la lucha contra la contaminación supone un costo económico para la industria y un obstáculo al crecimiento económico», algo que tacha de falso.
«Las tendencias mundiales desmienten esa concepción», asegura el documento, en el que se agrega que «el desarrollo sostenible es la única forma sensata de desarrollo desde todos los puntos de vista, incluido el financiero y económico».
«La inversión en tecnología verde es una estrategia para lograr la rentabilidad a largo plazo y la prosperidad universal», afirma la agencia, que destaca el «rápido abaratamiento» de las energías renovables y asegura que los primeros países que sustituyan los combustibles fósiles por las energías solar y eólica obtendrán una ventaja competitiva sobre el resto.
En su opinión, es preciso «un nuevo enfoque de gestión» del sistema económico en su conjunto y del estilo de vida occidental moderno: «hay que promover el consumo y la producción sostenibles fomentando el uso eficiente de los recursos», que de prioridad a «la reducción y gestión de los desechos».
El Pnuma cree asimismo que es preciso «liderazgo político y alianzas» para que salga adelante un acuerdo mundial contra la contaminación que garantice «la colaboración de las instancias más altas».
La prevención, argumenta el texto, «se convertiría en una prioridad para todos y se alentaría» a la clase política y empresarial «a integrar la prevención en la planificación nacional y local», en «los procesos de desarrollo» y en «las estrategias empresariales y financieras».
También se resalta la importancia de fortalecer el gobierno multilateral en el ámbito medioambiental y de adoptar medidas «dirigidas específicamente a los contaminantes más agresivos», mediante la evaluación de riesgos y una aplicación más rigurosa de la legislación ambiental.
Además, el Pnuma aboga por informar a la ciudadanía, motivarla para reducir su huella contaminante y «promover el compromiso de los sectores público y privado con las estrategias más audaces de lucha contra la contaminación».
En este contexto, la agencia de la ONU apuesta por el optimismo y pide «apuntar mucho más alto» aprovechando la coincidencia de cuatro factores que, combinados, pueden dinamizar la transformación que exige.
Estos factores son una creciente concienciación ciudadana, un conocimiento científico más certero sobre los efectos de la contaminación y un desarrollo tecnológico avanzado y unos agentes financieros más sensibilizados con la cuestión medioambiental.