El Ocean Viking dibuja un corazón en el mar para reivindicar un puerto en el que desembarcar
La nave, que se encuentra desde hace una semana entre Italia y Malta, ha realizado cuatro rescates sucesivos entre el 9 y el 12 de agosto
La ONG SOS Mediterránea, que opera junto con Médicos Sin Fronteras (MSF) el barco humanitario Ocean Viking, ha advertido de que necesitan una solución «rápida» para desembarcar a sus 356 inmigrantes y evitar que la situación degenere a bordo.
Esta petición ha llegado acompañada de un tuit publicado por la cuenta de MSF en el que se muestra, en una imagen de satélite, el dibujo de un corazón que el barco trazó con su trayectoria en aguas del Mediterráneo.
Su llamamiento se ha producido después de que la Fiscalía de Agrigento (Sicilia) ordenara la incautación del barco humanitario español Open Arms y el desembarco inmediato en el puerto italiano de Lampedusa de los alrededor de 90 migrantes que seguían a bordo.
«Es para que no se olvide que hay seres humanos que necesitan ser atendidos. Es un mensaje a Europa para que no olvide sus promesas», ha declarado el director de Operaciones de la organización, Frédéric Penard, quien ha recalcado que necesitan una respuesta cuanto antes porque llevan gente «vulnerable».
«El capitán hizo su trabajo al asistir a personas en peligro en alta mar y le corresponde ahora a los Estados hacer el suyo y encontrar una solución, que debe ser rápida», ha dicho a Efe Penard.
La nave se encuentra desde hace una semana a una distancia equidistante de Italia y Malta. El primer país no les ha dado respuesta y el segundo argumenta que no es un asunto de su competencia puesto que los rescates se produjeron fuera de las aguas bajo su responsabilidad.
«No serviría de nada que nos fuéramos a otro país», ha añadido Penard, que pidió la puesta en marcha «urgentemente de un sistema solidario» entre países europeos.
El #OceanViking envía un mensaje desde aguas internacionales. Esta ha sido su ruta las pasadas 24 horas. 356 personas esperan un lugar seguro. https://t.co/dQjYF2PkUo pic.twitter.com/FISl5emva0
— MSF Prensa (@MSF_Prensa) August 21, 2019
El Ocean Viking ha realizado cuatro rescates sucesivos entre los pasados 9 y 12 de agosto y su representante ha subrayado que, aunque la situación todavía está bajo control, el estrés entre sus ocupantes empieza a aumentar.
«No entienden la situación. Nosotros somos muy transparentes, pero tenemos muy poca información que compartir. El barco tiene un límite de 300 personas. Podemos gestionarlo, pero fue concebido como una solución de urgencia para ir cuanto antes a un puerto», ha expresado Frédéric Penard.
«Esta situación nos recuerda la importancia de tener un mecanismo de gestión de cuestiones migratorias que se haga a escala europea«, ha subrayado este miércoles la portavoz del Ejecutivo francés, Sibeth Ndiaye, en una comparecencia ante la prensa tras el Consejo de Ministros.
Sin ese mecanismo «sabemos que esas situaciones se repetirán y evidentemente no son aceptables para los migrantes que atraviesan situaciones extremadamente difíciles», ha avisado.
Las autoridades francesas se han comprometido a acoger a 40 de los rescatados por el Open Arms cuando atracara y Ndiaye ha apuntado que una delegación de la Oficina Francesa de Protección de los Refugiados y Apátridas (OFPRA) viajará «en las próximas horas» hasta allí para examinar la situación.
