El amigo de Sánchez en Transportes concede 60.000 euros a la entidad pública que le becó
Iñaqui Carnicero no se abstuvo en el tribunal que decidió varios proyectos para la Real Academia de España en Roma donde estuvo becado en 2008
Pedro Sánchez e Iñaqui Carnicero. | Foto: Europa Press y RRSS
Iñaqui Carnicero, director general de Agenda Urbana y Arquitectura dentro del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, ha impulsado varias obras de rehabilitación y ampliación valoradas en 60.000 euros para la Real Academia de España en Roma (RAER), un organismo público en el que estuvo becado en el curso 2008-2009 con un proyecto de Arquitectura.
La entrada de Carnicero en el Ministerio de Transportes en junio de 2020 fue polémica ya que está considerado como el mejor amigo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fuera de la política. Ambos se conocieron en el Instituto Ramiro de Maeztu y desde entonces mantienen una estrecha amistad.
El Ministerio de Transportes anunció el pasado 5 de abril los ganadores del concurso de varios proyectos para la rehabilitación y ampliación de la RAER. Una iniciativa promovida conjuntamente con el Ministerio de Asuntos Exteriores ya que esta institución pública con sede en Roma está adscrita al departamento de José Manuel Albares. En la convocatoria participaron 40 equipos de profesionales.
Carnicero presidió el jurado formado por altos cargos de ambos ministerios en el que estaban Hilda Jiménez, directora general del Servicio Exterior del Ministerio de Asuntos Exteriores; Mª Ángeles Albert de León, directora de la RAER; Marta Callejón, subdirectora general de Arquitectura y Edificación; Juan Bordes, representante de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en el Patronato de la RAER; Elías Torres, Margherita Guccione y María Langarita «como arquitectos de reconocido prestigio»; y Elena Calama, jefa de área de Difusión de la Arquitectura y secretaria del jurado.
El amigo de Sánchez debería haberse abstenido
Fuentes gubernamentales consultadas por THE OBJECTIVE estiman que, como mínimo, el amigo de Sánchez debería haberse abstenido de presidir dicho jurado por su trabajo becado en la RAER en el pasado. Este diario preguntó al Ministerio de Transportes por esta cuestión, pero no obtuvo respuesta.
La Dirección General que dirige Carnicero optó «por la fórmula de concurso de proyectos bajo lema, con intervención de un jurado de prestigio», en un proceso de selección el que prima «la calidad arquitectónica y viabilidad técnica, económica y constructiva» de los proyectos. Se entregaron un primer premio de 30.000 euros, un segundo de 15.000 y dos accésits, dotados cada uno de ellos de 7.500 euros.
El equipo ganador será el encargado de elaborar el proyecto de ejecución y la dirección facultativa de las obras. La Real Academia de España ocupa un conjunto arquitectónico de valor histórico y patrimonial en Roma que es el producto de numerosas adiciones e intervenciones que han ido sumando elementos a lo largo de cinco siglos, desde 1480 hasta la década de 1940.
Este conjunto de edificios acoge a creadores e investigadores españoles desde el año 1881. Por la capital italiana han pasado más de millar de becados. Uno de ellos fue el propio Carnicero en el curso 2008-2009 ya que aparece en el listado histórico de de becarios para un proyecto de Arquitectura (ver abajo).
Los edificios objeto del concurso son el edificio principal del convento entorno al claustro del Pomarancio, el pabellón de acceso de 1929, la ampliación de los años cuarenta del pasado siglo, el área habitacional del convento franciscano, la capilla de San Antonio de Padua, junto con «los ambientes y almacenes varios en el jardín además de los espacios exteriores como jardín interno, el jardín romántico, los patios y las terrazas», según enumeró el departamento de Raquel Sánchez a principios de abril.
«El objetivo que busca esta actuación es rehabilitar y readecuar funcionalmente aquellos espacios originales de la Academia como un centro de residentes y de actividad cultural que, por el transcurso del tiempo, la obsolescencia de las instalaciones o la falta de algunas infraestructuras hoy fundamentales, necesita una intervención», justificó el Ministerio de Transportes, que este año tiene una partida de 24 millones de euros para el programa de rehabilitación de edificios públicos como los de la RAER.
