Dos diputados pugnan por suceder a Olona para liderar Vox en Andalucía
Los parlamentarios Javier Cortés y Manuel Gavira, que ya ostentó esta responsabilidad en la pasada legislatura, optan a relevar a la alicantina
Macarena Olona y Javier Cortés en la sesión de investidura. | Angel Garcia (Zuma Press)
Macarena Olona ya es historia. La alicantina puso este miércoles punto y final a su fugaz carrera como diputada en Andalucía. Dos parlamentarios pugnan por sucederle en la tarea de liderar Vox en la Cámara regional. Por un lado, el cabeza de cartel por Cádiz, Manuel Gavira, que ya ostentó esa responsabilidad en la pasada legislatura. A su favor, que conoce el funcionamiento del Parlamento y que goza de gran predicamento entre la parroquia andaluza. Por otro, Javier Cortés, presidente provincial de la organización en Sevilla y muy valorado por la dirección nacional, a quien corresponde la elección. De momento, la formación verde guarda silencio sobre la decisión.
El proceso se abrirá este jueves, tras hacerse efectiva la renuncia de Olona, un trámite indispensable para elegir nuevo portavoz. La abogada de Estado fue designada oficialmente candidata en Andalucía el 28 de abril. Su camino hacia las elecciones fue tortuoso. La ley electoral andaluza le obligaba a estar empadronada en un municipio de la región. Se inscribió cinco meses antes en una vivienda del presidente provincial del partido en Granada, Manuel Martín Montero, que dejó el cargo de forma voluntaria hace unos días tras ser condenado a indemnizar con 72.000 euros a tres afiliados a los que no se permitió concurrir a las primarias.
El sustituto de Olona
Dos salidas sensibles para Vox con apenas unos días de diferencia. El hueco que más urge cubrir es el de Olona, que la semana pasada, y por sorpresa, anunció que abandonaba sus responsabilidades políticas por motivos de salud. Algunas voces dentro del partido ponen en tela de juicio esta explicación y la achacan a cuestiones personales. La alicantina se había convertido en el azote del Gobierno en el Congreso, papel con el que había adquirido una gran notoriedad pública.
Su entorno cree que la denigraron a Andalucía con la promesa de ser vicepresidenta. La mayoría absoluta de Juanma Moreno impidió ese escenario y Vox quedaba así relegado a un papel secundario en esta legislatura. Olona solicitó a la dirección nacional volver a Madrid, pero la petición no fue atendida. Fue entonces cuando decidió dejar la política. Sus compañeros barruntaban el movimiento, explica a THE OBJECTIVE una persona cercana a la formación verde. Por ese motivo, relata, el grupo parlamentario habría reculado en su decisión de colocar a Gavira en la vicepresidencia tercera de la Mesa, puesto que les cedió el PP aunque no les correspondía.
El lugar de Gavira lo ocupó Mercedes Rodríguez Tamayo, que en principio estaba destinada a ser una de las portavoces de Vox. Una variación extraña que llamó la atención de algunos miembros de la formación verde. Tras el cambio de cromos, quedaron como lugartenientes de Olona el propio Gavira y Javier Cortés, que se estrena esta legislatura en la Cámara regional. La renuncia de la que fuese candidata en los comicios ha abierto una lucha velada por el ascenso en el organigrama, en el que el cabeza de cartel en Cádiz ocupa la secretaría general del grupo.
Cada cual juega sus cartas y ambos tienen serias opciones de ser los elegidos. A Gavira, abogado gaditano de 52 años, ocupar la secretaría del grupo no le inhabilita para alcanzar la portavocía, según las fuentes consultadas. En su favor juega que la pasada legislatura ya desempeñó esa responsabilidad. Lo hizo desde mayo de 2021, tras la salida del juez Francisco Serrano y el relevo de Alejandro Hernández. El cordobés sigue ocupando uno de los 14 asientos de Vox en la Cámara regional, pero en esta ocasión su concurso como ariete parlamentario está descartado.
El favorito de Madrid
Gavira cuenta con gran predicamento entre la parroquia andaluza. En la pasada legislatura fue uno de los hombres fuertes del grupo parlamentario. Algunas voces señalan que lo controlaba con mano de hierro. Incluso le responsabilizan de que la parlamentaria Ángela Mulas no repitiera como número dos en la lista por Cádiz en las pasadas elecciones autonómicas. Un extremo que el partido niega. El letrado gaditano ya sonó como cabeza de cartel en Andalucía, algo que él mismo se encargó de desmentir cuando todo apuntaba a que sería Olona. «Nosotros somos soldados y haremos lo que nos manden».
La frase sigue en vigor. La dirección nacional se debate ahora entre el continuismo con Gavira, un perfil que ya le funcionó en la pasada legislatura, u otra persona que dé un impulso a una formación que, a pesar de obtener dos escaños más respecto a las elecciones de 2018, parece haberse estancado. Ese nuevo rostro lo encarna Javier Cortés, al que siempre han colmado de parabienes en Madrid. Cortés, de 44 años, es licenciado en Administración y Dirección de Empresas y ha trabajo durante dos décadas como responsable comercial en la banca. Desde 2020 es presidente provincial de Vox en Sevilla.
Los de Santiago Abascal barajan más alternativas. En las quinielas, aunque con menos fuerza, aparece el nombre de Rodrigo Alonso, parlamentario por Almería y actual presidente del grupo parlamentario. Su elección obligaría a reorganizar el organigrama. Las fuentes consultadas no descartan ningún movimiento que pueda suponer un revulsivo, pero creen que la candidatura del líder del sindicato Solidaridad es un farol. El Parlamento andaluz retoma su actividad la primera semana de septiembre, cuando deben constituirse las comisiones y comenzarán a comparecer los consejeros del nuevo Gobierno andaluz.
