LLYC ficha al último embajador ante la UE, posible sucesor de Albares si el PP gobierna
La consultora incorpora a su equipo al diplomático Pablo García-Berdoy tras más de cinco años destinado en Bruselas
Pablo García-Berdoy (i) y José Manuel Albares (d). | EP
La consultora Llorente y Cuenca (LLYC) ha fichado al diplomático Pablo García-Berdoy, embajador español ante la UE hasta mediados del pasado mes de julio, según informa el Gobierno en su página del Portal de Transparencia tras la preceptiva autorización del Ministerio de Asuntos Exteriores que dirige José Manuel Albares.
García-Berdoy solicitó la autorización a sus superiores en Exteriores -imprescindible por su condición de alto cargo- el pasado 21 de julio, un año después de que su cese como representante permanente de España ante la UE apareciese en el Boletín Oficial del Estado (BOE), por lo que tuvo un tiempo de transición antes de su fichaje con la compañía que preside José Antonio Llorente.
La luz verde del departamento de Albares se produjo el pasado 7 de septiembre y el exembajador ya indica en sus redes sociales que está «en excedencia», la condición que Exteriores asigna a los diplomáticos que se pasan a otro puesto de la Administración General del Estado o al sector privado, como es el caso ahora de García-Berdoy.
Fuentes cercanas al diplomático señalan a THE OBJECTIVE que en LLYC trabajará como asesor de un nuevo departamento -llamado European Affairs-, cuyo lanzamiento se va a anunciar próximamente y que quedará encuadrado dentro del área de Asuntos Públicos de la firma.
Ese departamento de nuevo cuño asesorará a empresas en contexto europeo, legislación y regulación, sobre todo. García-Berdoy estará a caballo entre Madrid y Bruselas pues LLYC no tiene delegación en la capital comunitaria, aunque la consultora está barajando precisamente abrir una oficina allí, subrayan las citadas fuentes.
Candidato a suceder a Albares
El desembarco del exembajador ante la UE en LLYC ha sorprendido a buena parte de sus compañeros en Exteriores, que interpretan este fichaje como un intento de la consultora por tener cerca a un diplomático próximo al PP y que podría tener un papel relevante en la próxima legislatura si Alberto Núñez Feijóo llega al poder.
Varios embajadores coinciden en que García-Berdoy es candidato a suceder a Albares si el PP gana las elecciones. Conoce en persona al expresidente de la Xunta de Galicia y su currículum europeo es parecido al que llevó a Mariano Rajoy a elegir a Alfonso Dastis como jefe de la diplomacia española en su segunda legislatura. También podría convertirse en el próximo secretario de Estado para la UE.
LLYC empezó a colaborar con Exteriores en la etapa del ‘popular’ José Manuel García Margallo con cursos online para los trabajadores de la Oficina de Información Diplomática (OID) y los agregados de comunicación, a los que enseñó a mejorar el posicionamiento del ministerio en las redes sociales. En paralelo, Albares entró en el «círculo de amigos» de Llorente coincidiendo con la llegada de Pedro Sánchez a la Secretaría General del PSOE. Una vez nombrado embajador en Francia, Albares invitó al empresario a varios actos en la legación española en París. En el gabinete de Albares trabaja en la actualidad como asesora de protocolo Irene Rodríguez, esposa de José Antonio Llorente.
García-Berdoy nació en Madrid en 1961, es licenciado en Derecho e ingresó en la carrera diplomática española en 1987. Habla cuatro idiomas -inglés, francés, alemán y rumano-. Sus primeros puestos relevantes en Exteriores coincidieron con la llegada de José María Aznar al poder.
Primero se convirtió en director de gabinete de Ramón de Miguel, entonces secretario de Estado de Política Exterior y para la UE entre 1996 y 2000. Luego estuvo más de dos años ejerciendo la misma función con la presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, para pasar a finales de 2002 a director general de Política Exterior para Europa con Ana Palacio como jefa de la diplomacia.
En marzo de 2005, un año después de la victoria de José Luis Rodríguez Zapatero, fue enviado de embajador a Rumanía, donde pasó cuatro años hasta que en octubre de 2009 pidió su primera excedencia voluntaria para poner en marcha la filial española del Aspen Institute. En marzo de 2012, ya con Rajoy en la Moncloa, fue nombrado embajador en Alemania y en diciembre de 2016, representante permanente de España ante la UE. Así que ha pasado la mayor parte de su último destino diplomático en Bruselas a las órdenes de Pedro Sánchez y sus ministros de Exteriores –Josep Borrell, Arancha González Laya y el citado Albares-.
