Una magistrada progresista del Constitucional contradice al Gobierno: «Esto no es un complot»
Defiende que el control que debe hacer el TC sobre las leyes «debe ser a posteriori», cuando las normas estén ya aprobadas
La magistrada del Tribunal Constitucional, María Luisa Balaguer Callejón | Jesús Hellín (Europa Press)
La magistrada progresista del Tribunal Constitucional (TC) María Luisa Balaguer no ha dudado en contradecir al Gobierno de Pedro Sánchez y ha defendido que la decisión del TC de paralizar la reforma exprés del Ejecutivo para acelerar su renovación «no es un complot» del tribunal y de las «derechas» del Parlamento.
Así se ha pronunciado la magistrada en Onda Cero, donde ha asegurado que el control que debe hacer el TC sobre las leyes «debe ser a posteriori», cuando las normas estén ya aprobadas, y ha añadido que los juristas están para «pacificar» el conflicto y tener un debate sereno como se tuvo.
Balaguer, que como los otros magistrados del bloque progresista emitió un voto particular, ha reconocido que no vio razonable «que se pudiera interrumpir la votación del Parlamento», porque no le «parece propio de la soberanía nacional», según ha informado Onda Cero en un comunicado.
Ha insistido en que el TC es un órgano institucional que está «llamado al control, pero el control debe ser siempre a posteriori», y ha añadido que su cometido es «pacificar» los conflictos que pongan en riesgo la estabilidad del poder judicial.
Preguntada si la reforma tendría que haberse tramitado como proposición de ley, Balaguer ha recalcado que en lo que va de legislatura» el Gobierno ha cambiado o introducido enmiendas en ocho ocasiones, pero todos los gobiernos han introducido», lo que no quiere decir que «sea correcto técnicamente».
Asimismo, señala que va a intentar hacer público un voto particular lo antes posible y que en el expondrá que se ha interpretado erróneamente el esquema de derecho constitucional básico porque se ha coartado la soberanía popular.
