Los policías y militares 'trans' acaparan el 8-M: «Saldrán más casos que violadores a la calle»
La irrupción de la asociación TNN solivianta al movimiento feminista, que pide derogar la ‘ley trans’ para evitar más casos
El logo de la asociación TNN. | Ilustración de Alejandra Svriz
Este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, el debate feminista se centra inexorablemente en la constitución de la asociación Trans No Normativos, compuesta por policías nacionales y militares que se han cambiado de sexo registral pero que mantienen sus nombres y sus genitales masculinos, así como su apariencia externa previa al cambio. Son ya cientos de miembros, y amenazan con seguir creciendo, pues su objetivo es ofrecer asesoramiento a quienes quieran llevar a término esta transición. Su irrupción ha colocado la reforma o derogación de la ley trans en el epicentro del 8-M, por delante de la abolición de la prostitución, de la «violencia machista» o de la pornografía.
Las feministas clásicas, aglutinadas en la Alianza Contra el Borrado de las Mujeres, piden que se derogue la ley trans para «poner freno» a la cascada de varones que acuden al Registro Civil a cambiarse de sexo, advirtiendo de que «saldrán más casos que violadores a la calle», en obvia alusión a la polémica ley del sólo sí es sí.
Sus impulsoras desoyeron todas las advertencias, e incluso se mofaron de ellas. «De los creadores de ‘Las personas van a ir al registro a cambiarse de sexo todas las mañanas’ llega… ‘¡Los violadores a la calle!’», ironizó la exsecretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodriguez Pam, en 2023. Ambas bromas ya se han materializado.
‘Sólo sí es sí’ y ‘ley trans’
Si la ley del sólo sí es sí ha supuesto una reducción de la pena para 1.233 depredadores sexuales, así como 126 excarcelaciones, la ley trans ha supuesto que 3.160 varones se cambiasen de sexo registral en 2023, con sólo diez meses de la norma estrella de Irene Montero en vigor. El paralelismo entre ambas normas está servido.
El Ministerio de Igualdad impulsó la primera norma pese a que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) advirtió, en un informe de 2021, de que su aprobación, al modificar el artículo 178 y otros del Código Penal para crear una única categoría delictiva de agresión sexual -destipificando el abuso sexual-, provocaría una revisión a la baja de aquellas condenas en las que se hubieran impuesto penas máximas conforme a la regulación anterior. La ley del sólo sí es sí terminó por ser reformada en el Congreso de los Diputados para elevar las penas de los delitos sexuales tras los «efectos indeseados», en palabras del PSOE, que había generado.
Del mismo modo, las feministas, e incluso muchos varones, advirtieron de que la ley trans iba a suponer una cascada de cambios de sexo registral de varones a mujeres buscando la discriminación positiva (y es que en España existen 475 diferencias legales entre hombres y mujeres). Así ha sido porque la norma pone extremas facilidades para la transición: basta con «la libre declaración de la persona sentida», la compleción de un formulario y la ratificación.
TNN
El pasado 22 de febrero Trans No Normativos-TNN quedó constituida como asociación ante el Ministerio del Interior. Impulsada por un grupúsculo de militares, policías nacionales y guardias civiles, ya aglutina a más de un centenar de personas trans. Son, en definitiva, varones con una estética muy masculina que se identifican como mujer pero que no quieren realizar un cambio de sexo más allá del registral. Enarbolan el «yo sí te creo, hermana» por bandera, lo que significa que no cuestionan la libre determinación de quien se sienta mujer.
Su irrupción ha causado mucho revuelo, y su gira por las televisiones ha cargado de razones al feminismo clásico, que ha visto cómo sus advertencias se han visto materializadas. Los transfeministas, por otro lado, insisten en hablar de «fraude de ley», que no sólo no es tal, sino que se exponen a una denuncia por «transfobia» con arreglo al artículo 79.2 a) de la norma que ellos mismos defienden.
Este año, el 8-M volverá a evidenciar la ruptura del feminismo. En Madrid habrá dos marchas, la del Movimiento Feminista de Madrid, que se manifestará contra la ley trans y contra la prostitución, y la de Comisión 8M, que es en la que participarán los miembros del Gobierno de España. Quienes no descartan acudir a estas últimas manifestaciones, las transincluyentes, son las asociadas a TNN, que han creado un cartel especial para la ocasión agradeciendo a Irene Montero la ley.
