Crimen de Barbate: la Guardia Civil descarta que los detenidos sean los verdaderos autores
Un informe recién incorporado a la causa concluye que los encarcelados no conducían la narcolancha del ataque
La Guardia Civil ha descartado que los seis investigados, actualmente en prisión preventiva, por el presunto asesinato de los dos agentes en Barbate sean los autores del crimen. Una conclusión a la que han llegado los investigadores tras examinar un vídeo de los hechos en el terminal de uno de los detenidos. En el informe, fechado el 7 de mayo y al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. el instituto armado señala que «en base a los elementos objetivos recabados en el punto actual de las pesquisas es posible concluir que la embarcación que arremete en el puerto de Barbate hasta en seis ocasiones contra la patrullera oficial de la Guarida Civil no es la narcolancha intervenida la mañana del 10 de febrero en la Playa La Hacienda de La Línea de la Concepción».
El equipo de investigación ha llegado a este extremo tras analizar, además de numerosas imágenes y testimonios de testigos, un vídeo clave, aportado por la defensa de uno de los investigados, Jose Antonio G.C, que sitúa a los imputados por el asesinato a unos 600 metros de donde se produjo la embestida, y que supuso un giro de 180 grados en el caso, tal como contó este periódico. «Consecuentemente es posible descartar la participación de los actualmente investigados en la perpetración de los delitos de asesinato y atentado agravado objeto de las presentes pesquisas, sin que ello afecte a la presunta comisión de un delito de contrabando», señala el dossier, elaborado por agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Cádiz y de la Sección de Homicidios, Secuestros y Extorsiones de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.
La narcolancha de Chiclana
Los investigadores ponen el foco ahora en otra embarcación. Se trata de una narcolancha de cuatro motores y una antena queapareció varada y visiblemente golpeada al día siguiente de la tragedia, el 10 de febrero, en la playa de Chiclana de la Frontera (Cádiz), a unos 30 kilómetros del recinto portuario y cuyos ocupantes nunca fueron identificados por la Guardia Civil, según relataron a este periódico fuentes próximas del caso. Esa misma mañana, de hecho, el instituto armado detuvo a Kiko El Cabra y a otros dos investigados en la playa de la Hacienda, en la Línea de la Concepción. Y horas antes, durante la madrugada, a los otros tres supuestos implicados, en la costa de Sotogrande. Todos ellos investigados por los delitos asesinato y atentado agravado y cuyo futuro judicial dependerá ahora del titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Barbate.
En el informe, los agentes sitúan el origen de «esta relevante información» en lo declarado en sede judicial por José Antonio G.C., quien, tal como contó este periódico, afirmó haber grabado lo que ocurrió el pasado 9 de febrero de 2024 en el puerto de Barbate (Cádiz), mientras se encontraba a bordo de una narcolancha distinta a la autora, ubicada al pairo en la bocana del citado recinto portuario, «siendo coincidente este emplazamiento con la perspectiva desde la cual parece realizarse la grabación». Un lugar, apunta el estudio, «compatible a su vez con la embarcación de cuatro motores advertida en la reconstrucción de los movimientos registrados por la narcolancha que embiste a la embarcación de la Guardia Civil».
Cuatro motores y una antena
Tras esto, los investigadores localizaron la grabación de vídeo, de 3 minutos 3 segundos, efectuada desde el propio teléfono y cuya última fecha de modificación quedó registrada el día de los hechos. Este archivo, señala la Guardia Civil, «recoge la secuencia de movimientos previos efectuados por una narcolancha diferentes a la que se encuentra José Antonio G.C. antes, durante y después de llevar cabo la fatal agresión, la cual quedó filmada en el video grabado por el usuario del terminal analizado». Lo que descarta que él así como todos los que le acompañaban en su embarcación estuviesen relacionados con los hechos que se les imputan.
De este modo, concluyen los investigadores, «solo una embarcación de cuatro motores y una antena ocupada por al menos tres tripulantes y reseñada en el citado informe como narcolancha dubitada 1, habría llevado a cabo un total de seis ofensivas contra los agentes, siendo al última de ellas mortal para dos de los seis tripulantes de la embarcación oficial de la Guardia Civil». El juez del caso, Ángel Rojas Navarro, decidió admitir esta hipótesis, ahora confirmada, después de que los expertos de la Guardia Civil corroborasen que el vídeo, filmado por el detenido Jose Antonio G.C., no hubiese sido manipulado. Un extremo que confirmaron a través del análisis de los metadatos del archivo informático y comparándolo con otros nueve vídeos incorporados a la causa.
La declaración de los cuatro agentes en Barbate
Cabe destacar que las defensas de los detenidos pidieron ya hace meses que el instituto armado se incautase de la lancha, localizada en Chiclana de la Frontera, para poder cotejarla con la otra que encontraron los investigadores. Ambas, según señalan fuentes de la investigación, estaban dañadas: la primera tenía un gran boquete en la quilla y la segunda, la que conducían los detenidos, tenía marcas de pintura grises y rojas que, a juicio de los investigadores, en un principio eran compatibles con las que presentaba la neumática siniestrada de la Guardia Civil. No era así, según el último informe de la UCO.
La principal incógnita a despejar ahora por las pesquisas es quién pilotaba esa embarcación de cuatro motores y una antena de color azul, que embistió en seis ocasiones la embarcación de los agentes. Un punto que también podrían resolver los cuatro de los seis agentes que sobrevivieron al ataque y que declararán en calidad de testigos el próximo viernes 10 de mayo en el juzgado de Barbate.
Propiedad de un marroquí
En su declaración, otro de los investigados, Mustafá C. aseguró que la «goma» autora del ataque era propiedad de «un marroquí de nombre Karim que vivía en el reino alauí», y que en ella iban cuatro personas, «dos de nacionalidad española y otras dos en situación irregular». Asimismo, señaló que mientras ellos, es decir, los detenidos, tenían la narcolancha en una zona cercana a «la boya roja», la otra, que perpetró el ataque, estaba en otra ubicación «cercana a una boya verde». «Es la que mató a esa gente», insistió Mustafá C. en su declaración como imputado ante el titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Barbate. En cualquier caso, la Guardia Civil defiende ahora en el informe que los implicados serían tres individuos.