El juez no contempla archivar aún el caso de Begoña Gómez pese al informe de la UCO
La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil no ha exonerado a la esposa del presidente del Gobierno
El informe que ha elaborado la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sobre las actividades particulares de la esposa del presidente del Gobierno no exonera a Begoña Gómez de los delitos de tráfico de influencias y corrupción en el sector privado, según ha podido saber THE OBJECTIVE de fuentes de la investigación. Dicho informe se limita a exponer el resultado de sus averiguaciones, no a emitir un juicio penal sobre la conducta de Gómez. Por este motivo, y según las fuentes consultadas, el juez instructor no prevé archivar, por el momento, la causa contra la esposa del presidente del Gobierno.
Este martes, el diario El País ha publicado que la UCO no ha encontrado que la esposa del presidente tuviera alguna influencia en el rescate a Air Europa ni tampoco en los concursos convocados por Red.es. Sin embargo, fuentes de la investigación consultadas por este periódico aseguran que el informe no certifica que no se haya cometido delito alguno y que lo publicado corresponde a solo una parte del mismo.
Hace un mes, un juzgado de Madrid abrió diligencias previas contra Begoña Gómez para investigar sus vínculos con diversas empresas privadas que posteriormente obtuvieron contratos y fondos públicos del Gobierno dirigido por su esposo. El caso, que está bajo la supervisión del juez Juan Carlos Peinado del Juzgado de Instrucción número 41 en Plaza de Castilla, estudia la posible realización de delitos de tráfico de influencias y corrupción en el sector privado. Entre las primeras medidas ordenadas por el juez, figuran la citación de varios testigos y encargar un informe a la UCO sobre la vinculación de Gómez con empresas privadas que más tarde serían beneficiadas por el Gobierno.
En los últimos dos meses, tras la aparición del caso Koldo, Begoña Gómez ha estado en el centro de la atención debido a sus conexiones empresariales y personales. Una de las razones ha sido sus reuniones con Globalia justo antes de que el Consejo de Ministros aprobara un rescate para Air Europa, valorado en 475 millones de euros. Este grupo, vinculado a la familia Hidalgo, que entonces empleaba a Víctor de Aldama, principal intermediario en el escándalo de las mascarillas, recibió también apoyo gubernamental para rescatar otro de sus negocios, Ávoris, sumando un total de unos 1.000 millones de euros durante la pandemia.
Los vínculos entre la esposa de Sánchez y Globalia se remontan a tiempo atrás. En 2019, esta empresa del sector turístico lanzó Wakalua, una iniciativa para fortalecer relaciones e incrementar su influencia en esferas de poder. Dicha empresa fue establecida con la colaboración de la Organización Mundial del Turismo y tenía su sede en uno de los centros tecnológicos de Barrabés, quien ha sido colaborador en el proyecto académico que actualmente dirige Begoña Gómez. Además en 2020, el IE Africa Center dirigido por la mujer de Pedro Sánchez firmó un acuerdo de patrocinio con Globalia. Durante el mismo periodo, ella mantuvo esas reuniones en privado con Javier Hidalgo, CEO del grupo turístico, en las oficinas de la empresa.
Firmas avaladas por Gómez
En el contexto de la pandemia, la UTE formada por The Valley Digital Business School e Innova Next, la consultora del emprendedor tecnológico Carlos Barrabés que diseñó el máster dirigido por Begoña Gómez, obtuvo un importante contrato de 5,8 millones de euros, aunque su valor inicial era de 7,7 millones, financiado con fondos de la UE. Lograron este contrato a pesar de enfrentarse a algunos de los principales competidores de la industria.
Según reveló El Confidencial, la UTE, integrada por una pequeña y una mediana empresa, contó con la recomendación de Begoña Gómez. No solo superó varios requisitos, sino también recursos legales interpuestos por sus competidores, destacando el caso de la empresa gallega NT For Learning, que tenía fuertes posibilidades de ganar algunos de los lotes del contrato. Esta empresa argumentó que las empresas apoyadas por Gómez no cumplían con los planes de igualdad, un requisito que sí fue exigido al resto de los aspirantes.
El detalle de la contratación, al que pudo acceder de THE OBJECTIVE, indicaba que estas dos empresas, que en el momento de la licitación contaban con 60 trabajadores –Innova– y seis empleados –The Valley–, dejaron fuera a importantes multinacionales. Everis, ahora NTT Data, sexta compañía de servicios TI del mundo, DXC Technology y el gigante suizo Adecco quedaron descolgadas.