Gibraltar pide que sus ambulancias puedan cruzar la Verja tras pagar un millón a España

Las negociaciones entre el Gobierno de Reino Unido y la Unión Europea avanzan y se dan a conocer más detalles sobre los flecos del muy probable acuerdo. Según ha adelantado Europa Sur, una de las conversaciones que ha destacado en el tratado que se intenta cerrar es la referente al servicio de ambulancias, cuestión que ha perjudicado notablemente al Peñón.

Después de que se concretase el Brexit en 2020, la Autoridad Sanitaria de Gibraltar se vio muy afectada. Según el acuerdo, las ambulancias perdieron el permiso de traslado en España. A no ser que se trate de una emergencia extrema, el transporte sanitario no puede atravesar la Verja, al considerar que si ejercen su labor en territorio español formarían parte del registro europeo.

En mayo del pasado año, Albert Ísola, exministro de Salud del Gobierno de Gibraltar, aseguró que en tan solo dos años, el Peñón habría perdido alrededor de 700.000 euros en traslados de ambulancias inglesas a centros sanitarios españoles.

Una vez que la Autoridad Sanitaria de Gibraltar perdió las competencias para conducir ambulancias en España, el Gobierno del Peñón se vio obligado a contar con los servicios de tres empresas de ambulancias españolas. Gibraltar busca transformar este renglón en un acuerdo que le permita ahorrarse 350.000 euros al año.

Según informa Europa Sur, el Gobierno de Gibraltar ha contado con el servicio de tres empresas españolas para el traslado de pacientes a pruebas o revisiones médicas no urgentes: Ambulancias Andalucía S. Coop., Helicópteros Sanitarios y Socorrismo y Servicios. La factura en 2024 asciende al millón de euros.

Sí quedó dentro del acuerdo un trato excepcional para los casos donde la vida del paciente está en juego. En este tipo de escenarios, la Autoridad Sanitaria de Gibraltar puede realizar el traslado, aunque ofreciendo el correspondiente aviso a España.

Punto clave en el acuerdo

Fuentes cercanas al acuerdo tildan de muy relevante el diálogo en torno a este punto del pacto. El Gobierno de Gibraltar expresó su preocupación sobre un tema tan notable como la salud de los ciudadanos. En este sentido, la normativa permitió el rápido traslado en los casos más extremos. Sin embargo, la solución temporal no resulta suficiente para el Ejecutivo del Peñón.

El problema de fondo proviene de que se pusiera en práctica la aplicación de la normativa referente a la extranjería sobre conductores y transportistas. La obligación de tener en posesión un permiso de trabajo para ofrecer un servicio en territorio español dejó un vacío de peso sobre los servicios sanitarios.

La puesta en marcha del acuerdo tras el Brexit también supuso un mazazo para los transportistas de Gibraltar. Al quedar fuera de las licencias comunitarias y de los convenios internacionales vigentes, Reino Unido solicitó sin éxito la inclusión de los convenios internacionales propios del Consejo de Europa.

Tensión tras la Verja

Gibraltar ha sido una de las máximas afectadas después de la decisión de miles de ingleses el 23 de junio de 2016, cuando el 51,9% mostró su posición favorable a abandonar la Unión Europea. Después de varios años, las últimas encuestas apuntan a que tan solo un reducto de votantes considera que la salida del marco europeo fue la mejor opción.

El partido opositor, Gibraltar Social Democrats (GSD), ha definido en varias ocasiones como un «fracaso» los avances que se han conseguido en el acuerdo con España en materias tan relevantes como en la Sanidad.

Mientras continúa la espera para que se retomen las reuniones entre Europa y Gibraltar, algunos episodios presionan las relaciones entre los interlocutores. Según informó THE OBJECTIVE, el Tribunal de Primera Instancia emitió una orden de detención contra Jonathan Sánchez, un joven gaditano acusado de faenar en aguas gibraltareñas con métodos tipificados como prohibidos.

A este conflicto se suman las recientes críticas a las que se ha enfrentado el Gobierno de Gibraltar por las largas colas en la Verja que ha denunciado la Asociación de Trabajadores Españoles en Gibraltar. Los afectados, conocedores de la continua negociación, han señalado al Gobierno del Peñón y han avisado de que las acusaciones políticas podrían ser perjudiciales para «las negociaciones y el buen entendimiento».