IU pide retirar la guía andaluza de educación sexual por vulnerar derechos de menores trans
La izquierda culpa a la Junta de Andalucía por «discriminar» con una frase que recuerda al mensaje de «Hazte Oír»
El manual sobre educación sexual en la familia impulsado por la Junta de Andalucía ha sido cuestionado por los partidos de izquierda. Toni Valero, coordinador de IU Andalucía y diputado de Sumar en el Congreso de los Diputados ha exigido la retirada de la guía al considerar que su publicación supone asumir el «discurso tránfobo de Vox».
El documento «Educación Afectiva y Sexual en la Familia» forma parte de las guías Educomunicativas para familias elaboradas por la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad. Una de las oraciones que ha levantado la polémica recuerda al autobús promovido por la organización Hazte Oír, con el lema: «Los niños tienen pene, las niñas tienen vulva».
En la página 10 del manual los expertos apuntan a la necesidad de educar a los niños desde las familias ya que su ausencia implicaría que los menores acudan a internet para resolver sus dudas e inquietudes. Posteriormente, se alienta a los progenitores a marcar con «Sí» o «No» aquellos supuestos sobre los que ejerce formación en el ámbito sexual.
La quinta opción es la que ha desatado la disputa: «Le explico que los niños tienen pene y las niñas tienen vulva». Tras la tabla se añade: «Si tus respuestas mayoritariamente son NO, es hora de hacerlo».
La narración del texto justifica que enseñar a los niños este tipo de cuestiones resulta fundamental con vistas a evitar un aprendizaje nocivo para los menores. Según los estudios que respaldan el manual, la edad de inicio en el consumo de pornografía se sitúa alrededor de los 12 años.
En el caso de que los padres y las madres no afronten con sus hijos este tipo de cuestiones, los menores buscarán en internet y en redes sociales los conceptos sexuales que no comprendan, lo que podría llevarlos al consumo de pornografía como fuente de información.
Oposición de la izquierda
Toni Valero ha tildado de «escándalo» incluir esta declaración en el estudio. Según el coordinador de IU Andalucía, la guía «niega» a los «menores trans» y a las «personas trans en general». Además, agrega que va en contra de la ley LGTBI de Andalucía, la Ley estatal trans y la Ley estatal LGTBI.
Podemos también ha querido sumarse al cuestionamiento del Ejecutivo andaluz. Marina Velarde, portavoz de Podemos en Andalucía y diputada en el Congreso, ha resaltado que el documento va en contra de la Ley Trans y LGTBI de Andalucía, la Ley de Infancia y del Tratado Internacional de los Derechos del Niño. Además, ha señalado que rechazar la transexualidad en la infancia es una forma de «violencia».
Mar Cambrollé, presidenta de la Asociación de Transexuales de Andalucía ha expresado su descontento con la guía Educomunicativa al considerar que se debe abogar por el «interés superior de un menos trans», permitiéndole un «libre desarrollo de su personalidad» sin que una institución lo estigmatice.
Varios medios de comunicación afines a la izquierda han igualado la guía andaluza con el autobús de Hazte Oír que recorrió varias ciudades de España en 2017. La campaña de la organización católica sirvió como respuesta al mensaje de la asociación de familias menores transexuales Chrysallis que promocionaba: «Hay niñas con pene y niños con vulva, así de sencillo».
Los expertos hablan
El documento presentado por la Junta de Andalucía es una de las cinco guías dirigidas a las familias con el principal objetivo de ayudarlas en el proceso de educación de sus hijos. Según recoge el estudio, los padres se ven limitados a la hora de hablar de sexualidad con sus descendientes por numerosos factores como la falta de conciencia sobre la formación, el tabú que a día de hoy supone el tema o el miedo a responder por insuficiencia de conocimiento.
Expertos consultados por THE OBJECTIVE respaldan la guía como un «punto de inicio para establecer la familia como un lugar seguro para los menores». Ante el mar de desconocimiento en el que se sumergen los niños a través de internet, el estudio desarrollado por cinco profesores universitarios «supone un paso más para cerrar el cisma que se abre entre hijos y padres cuando surgen este tipo de inquietudes».