Un dirigente nacional del PP se rebela por las listas y complica la campaña en Barcelona
El portavoz de los ‘populares’ en el Ayuntamiento se niega a contratar a asesores del candidato y deja de asistir a los mítines de Feijóo
El actual portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Barcelona y miembro del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), Óscar Ramírez, ha convulsionado la campaña de los populares en la Ciudad Condal con una serie de despidos en el grupo municipal en los últimos días y su negativa a contratar a personas de confianza del candidato a los comicios del 28-M, Daniel Sirera, de aquí hasta que se constituya el nuevo consistorio, según desvelan varias fuentes del PP catalán a THE OBJECTIVE.
Ramírez ha quedado fuera de la lista del PP por Barcelona pese a que en esta legislatura fue uno de los dos concejales populares que han hecho oposición a Ada Colau. Sirera eligió los primeros puestos de su lista con sumo cuidado para no enfadar a los estandartes del PP catalán tras la polémica inclusión de un exdirigente de Centrem en el octavo puesto. Así, colocó de número dos en la papeleta al exdiputado autonómico Juan Millán, una figura próxima al líder regional, Alejandro Fernández. Y de tres ubicó a Ángeles Esteller, la que fuera mano derecha de Alberto Fernández durante varias legislaturas y actual miembro del Comité Electoral nacional del PP por decisión de Génova. Pero los siguientes nombres de la lista generaron malestar.
Víctor Martí, el número cuatro, es amigo de Sirera desde los tiempos de Nuevas Generaciones en Cataluña pero llevaba muchos años alejado de la primera línea política. Y la número cinco, Sonia Devesa, es desconocida para la mayoría de las fuentes consultadas por este periódico. En unos de estos puestos debería haber estado Óscar Ramírez, pero este último consideró insuficiente la oferta del candidato y prefirió apartarse.
El nuevo portavoz del grupo municipal del PP en Barcelona llegó al cargo tras la dimisión de Josep Bou a principios de abril, por lo que lleva menos de un mes al frente del mismo. Esta semana ha despedido de manera sorpresiva a la asesora Miriam Casanova, a la secretaria Gema Gesa y a la concejal de distrito en Las Corts, Irene Pardo, quien ostenta el cargo de presidenta de Nuevas Generaciones en Cataluña y que acaba de ser elegida candidata de los populares por la localidad de Sant Adrià de Besòs.
Ramírez «bloquea» las cuentas del grupo municipal
Los despidos han caído como un jarro de agua fría en el grupo municipal y en parte del PP catalán porque no eran esperados en este tramo final de la legislatura. Gesa, por ejemplo, es la histórica secretaria del portavoz del grupo municipal que Bou heredó de Alberto Fernández. Tres huecos laborales que se añaden al que dejó la concejal que ha sustituido a Bou, Inma Delgado, quien también trabajaba de asesora.
Las citadas fuentes subrayan que las salidas podían servir para meter nuevos asesores en este momento de la precampaña electoral, pero Ramírez se ha negado a fichar a personas que están ayudando a Sirera en su candidatura y ha decretado «un bloqueo» de las cuentas del grupo municipal, por lo que no dudan en advertir de que su actitud es de «franca rebeldía». THE OBJECTIVE ha intentado recabar la opinión de Ramírez sobre estos hechos, pero este último ha declinado responder a las preguntas.
El portavoz del PP en el Ayuntamiento barcelonés es un dirigente cercano al líder del PP catalán, Alejandro Fernández, y junto al cargo en la CEN ostenta el puesto de vicesecretario de Política Municipal en la dirección regional. Pese a ello, no ha estado presente en los últimos mítines de Alberto Núñez Feijóo en Barcelona y la vecina localidad de Castelldefels, donde el presidente del PP provincial, Manuel Reyes, busca recuperar la vara de mando que tuvo en la legislatura de 2011 a 2015.
Los populares viven las últimas semanas «con los nervios a flor de piel», en opinión de un dirigente, por las zancadillas y reproches que se están viendo entre algunos de ellos. Por ejemplo, la inclusión de la diputada Cayetana Álvarez de Toledo cerrando la lista del candidato de El Prat del Llobregat, Miguel Ángel Ochoa, no era conocida por la dirección regional.
En la reunión del Comité Electoral del PP catalán después de Semana Santa para aprobar las listas, Dolors Montserrat preguntó por la presencia de Álvarez de Toledo en la papeleta de Ochoa y nadie sabía nada. El secretario general de los populares en la provincia de Barcelona, Josep Tutusaus, llamó por teléfono al candidato para aclarar la situación.
Ochoa admitió que era así y que Álvarez de Toledo había aceptado ir en ese puesto testimonial por la amistad que les une desde que él ejerció de chófer en 2019 para su campaña en las generales como número uno por Barcelona, por lo que entendía que no tenía que pedir permiso a la dirección provincial o regional. Tutusaus le reprochó esto último y le advirtió de que la presencia de la diputada nacional en la lista por El Prat podía perjudicar a Reyes en la vecina Castelldefels.