La CUP asegura que los inmigrantes no delinquen más, sino que se les encarcela más
La líder separatista en Barcelona dice que «no delinquen más, les encarcelan más» porque «la justicia no trata igual a todas»
De un tiempo a esta parte, la inmigración descontrolada se ha convertido en uno de los ejes en torno a los cuales oscila el discurso de los distintos partidos en Cataluña. De izquierda a derecha, ante los problemas de delincuencia que atraviesa la región, desde el PSOE a ERC, pasando por Junts o Vox, han adoptado discursos más proteccionistas, a excepción de la CUP, que considera que si hay más inmigrantes que españoles en las cárceles catalanas es porque «les encarcelan más» y «la justicia no trata igual a todas».
Así se ha expresado este jueves la cabeza de lista de la CUP a las pasadas elecciones municipales de 2023 en Barcelona, Basha Changue, que ha sostenido que «a menudo la sobrerrepresentación de los migrantes en prisión tiene más que ver con la inequidad ante la justicia que otra cosa»: «No delinquen más, les encarcelan más, que es distinto. La justicia no trata igual a todas». Una aseveración que le ha merecido una lluvia de críticas de los usuarios de la red social X.
Y es que ese es el análisis -acusar veladamente a la Justicia y a los agentes de racistas- que la dirigente de la CUP hace de la problemática situación que atraviesa Barcelona en particular y Cataluña en general. En este sentido, en THE OBJECTIVE hemos contado cómo la Guardia Urbana de Barcelona, con datos internos, asegura que el 76,45% de los detenidos en la Ciudad Condal son extranjeros.
También fuimos los primeros en adelantar que Cataluña es la primera y única región de España tras cuyos barrotes viven más foráneos que españoles (4.050 de 8.041, el 50,37%, con cifras del CGPJ actualizadas en diciembre de 2023), y que el dato se dispara si nos remitimos a los reclusos jóvenes. Esto es, los que tienen entre 18 y 20 años. De entre estos, sólo el 27,9% son nacionales y el 72,1% extranjeros.
Entre estos jóvenes destacan los marroquíes, que ya son el 41,5% de los encarcelados de entre 18 y 20 años, por delante de los argelinos (11,6%) y albaneses (6,1%). Tres nacionalidades muy sobrerrepresentadas.
Si se tiene en cuenta el sector comprendido entre los 20 y los 25 años, los inmigrantes en cárceles catalanas representan el 72,5%, y de ahí en adelante, conforme aumenta la edad de los reclusos, el porcentaje va menguando: son el 64,79% de los presos de entre 26 y 30 años; el 53,87% de entre 31 y 40 años; el 43,09% de entre 41 y 50; el 31,93% de entre 51 y 60; el 19,47% de entre 61 y 70; y el 8,93% de 71 años o más. En cómputo global, el 50,37% en diciembre de 2023.
Estos son los datos, pero las conclusiones quedan a disposición de los partidos políticos. Cada vez más admiten que hay un problema de «integración» –el último, el líder del PSC, Salvador Illa-, pero la CUP sigue empecinada en deslizar que existe un problema de racismo en la judicatura y entre los agentes de la autoridad. «La Justicia no es igual para todas», sostienen.
No en vano, Basha Changue, como candidata de la CUP al Ayuntamiento de Barcelona, fue la que pidió vetar los gigantes negros de las fiestas catalanas por «enaltecimiento del colonialismo». Finalmente no obtuvo representación.