Tensiones en Moncloa por la crisis de gobierno: Darias quiere irse ya, pero Maroto se resiste
Pedro Sánchez retrasa un acto de campaña en Madrid hasta resolver una crisis en la que las dos ministras tienen posiciones encontradas
La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto (i) y la ministra de Sanidad, Carolina Darias (d), en una sesión de control al Gobierno en el Senado. | A. Pérez Meca (EP)
Es el último cabo suelto para cerrar el ciclo político 2022 y arrancar a toda velocidad la maquinaria electoral de 2023. La crisis de gobierno prevista por Pedro Sánchez para principios de este año para sustituir a las ministras de Sanidad, Carolina Darias, e Industria, Reyes Maroto, está generando «tensiones entre las salientes» del Consejo de Ministros a cuenta de los tiempos previstos para esa remodelación. Según ha podido saber THE OBJECTIVE, Darias quiere salir «cuanto antes», frente a la voluntad de permanencia de Maroto, que «necesita quedarse» para aprovechar la proyección de La Moncloa y elevar su escaso nivel de conocimiento por parte del electorado madrileño.
La versión oficial es que la crisis de gobierno se ejecutaría el mes de abril, pero los planes del presidente Sánchez, adelantados en diciembre por fuentes gubernamentales a este periódico, pasaban por anticipar la remodelación al mes de febrero, «incluso enero», para precipitar la campaña electoral desde el Gobierno, pero sin el lastre de que las candidatas fueran inquilinas en La Moncloa y pudieran centrarse en exclusiva en sus tareas electorales. Un riesgo asumible en el caso de Salvador Illa, cuando los sondeos internos anticipaban la histórica victoria del PSC en las urnas, pero no para Maroto, cuyo histórico resultado hace referencia al suelo y no al techo de la intención de voto del PSOE, que podría hundirse en la capital aún más que en la última debacle en 2021.
Y eso es precisamente lo que retiene a la titular de Industria, Turismo y Comercio en el Consejo de Ministros. Según las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE, los movimientos que se vienen produciendo en los entornos de Darias y Maroto desde el mes de diciembre van en dirección contraria y sus estrategias están tan alejadas como la distancia que separa Madrid de Las Palmas, ayuntamientos a los que concurren como cabeza de lista. «Darias tiene muchas opciones de ganar», explican fuentes gubernamentales como evidencia la intensa agenda que despliega en el consistorio canario desde hace ya meses, con especial hiperactividad en estos últimos. A Darias le sobra ya Moncloa y empieza a recibir críticas en el territorio por beneficiarse de la atalaya gubernamental para su candidatura, algo que le resta, en lugar de sumarle. Por este motivo, la ministra de Sanidad ha hecho llegar su voluntad de salir «cuanto antes» y liberarse de la actividad del ministerio.
En el otro lado de la moneda está, por contra, Reyes Maroto. Una candidata con un escaso nivel de reconocimiento: casi la mitad del electorado madrileño no sabe quién es la candidata del PSOE, concretamente el 49,6%. Por ello, «es urgente que abandone el ministerio y patee todas los ayuntamientos y pueblos de Madrid», apremian fuentes socialistas madrileñas. Desde el anuncio de su candidatura el pasado 15 de noviembre, la ministra ha evidenciado su escaso entusiasmo para centrarse de lleno en la campaña madrileña, ya que ha continuado e incluso intensificado su actividad en el Ministerio: desde la aprobación de la Ley de Industria -un brindis al sol que será imposible aprobar en esta legislatura- a la remodelación de la cúpula del ministerio con el cese y sustitución de los secretarios de estado de Turismo y el secretario general de Industria. Dos nombramientos con los que, a juicio de fuentes gubernamentales, demuestran que «quiere seguir mandando y no tiene prisa por salir».
De momento, su actividad gubernamental la compagina con la campaña madrileña solo en las redes sociales, donde publica vídeos dedicados a su contrincante en la capital, José Luis Martínez-Almeida. Según fuentes socialistas, «en el partido no se entiende nada. En Navidad, Reyes Maroto acompañó a Lobato a todas las copas de las agrupaciones… pero no tiene ningún sentido que siga en el Gobierno, como si fuera de tapada».
¿Por qué no abandona el Gobierno?
La respuesta es la sonada derrota que espera la candidata, con mucho predicamento y ascendiente sobre el presidente, Pedro Sánchez, dado su papel de consejera internacional del jefe del Ejecutivo. De hecho, ha acompañado a Sánchez en la mayoría de los viajes por su labor de defensa de las empresas españolas en el exterior. «Sánchez se fía de Maroto», explican algunos de sus asesores, que atribuyen a la candidata por Madrid la petición de demorar un poco su salida de Moncloa para intentar mitigar el golpe de mayo de 2023 con alguna que otra intervención gubernamental más que proyecte su candidatura madrileña.
No en vano, su primer mitin de campaña tuvo lugar en Moncloa, el pasado mes de noviembre, cuando utilizó su última intervención en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros para criticar las «mentiras y eslóganes» de Isabel Díaz Ayuso, proclamar que «Madrid necesita un cambio» y confiar en que «los madrileños y madrileñas asuman la labor de esta ministra» en la gestión de los fondos europeos. Sin embargo, la resistencia de Maroto en el Ejecutivo trastoca los planes de Sánchez en la planificación de la estrategia de campaña de cara a las municipales.
Este lunes, la Ejecutiva del PSOE constituyó el Comité de Campaña que encabezan el secretario de Organización, Santos Cerdán y la vicesecretaria general, María Jesús Montero. Y dio el pistoletazo de salida de la precampaña con los primeros actos de agenda. El próximo sábado 14 de enero, Pedro Sánchez estará en Sevilla en el primer gran mitin de 2023; le seguirán otros el sábado 21 en Valladolid y el viernes 27 en Las Palmas. Son plazas que el PSOE confía en mantener o conquistar y en las que Pedro Sánchez continúa con la hoja de ruta que se inició en diciembre, cuando comenzó la precampaña electoral en Barcelona en 11 de diciembre junto a Jaume Collboni y una semana después, el 17 de diciembre, en Valencia junto a Ximo Puig y la candidata del PSPV a la alcaldía, Sandra Gómez.
Faltaba una gran cita: Madrid. Y según ha podido saber THE OBJECTIVE, el mitin de Pedro Sánchez para arropar a Reyes Maroto estaba previsto en diciembre, antes de final de año y se suspendió. Se pospuso por varios motivos. Primero, las tensiones que relata este periódico para adelantar la crisis de gobierno y focalizar a las ministras en sus nuevas tareas electorales, lo cual haría inconveniente su celebración hasta después de la remodelación de Gobierno; y después, que a diferencia de Barcelona, Valencia, Sevilla, Valladolid y Las Palmas, Madrid está perdido en los sondeos internos del PSOE. No hay partido aunque haya una candidata que prefiere ser ministra.
