El Congreso rechaza la moción de censura de Tamames y Sánchez presume de fortaleza
Registra 201 votos en contra de PSOE, Podemos, ERC, PNV, Bildu, JxCat, PdeCat, BNG, CC, Más País, Compromís; 91 abstenciones del PP y 53 votos a favor de Vox
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. | Chema Moya (EFE)
Los cuarenta minutos de votación por llamamiento se hicieron largos para un panel de votaciones cuyo resultado ya se conocía. El Congreso de los Diputados rechazó este miércoles la moción de censura de Vox y su candidato, el veterano economista, Ramón Tamames, fue derrotado por 201 votos en contra de PSOE, Podemos, ERC, PNV, Bildu, JxCat, PdeCat, BNG, CC, Más País y Compromís; 91 abstenciones del PP y los únicos apoyos de los 53 votos a favor de Vox. Una votación sin tensión alguna que valoró antes de producirse el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presumiendo de fortaleza del Gobierno.
«Se equivocaron… Es un buen día para recordar que el Apocalipsis no ha llegado ni se le espera. Este gobierno reformista no sólo ha sido capaz de resistir pandemias, volcanes y guerras, sino que está fuerte y vamos a seguir avanzando desde la responsabilidad ambición y valentía, dispuestos a consolidar la década de progreso que nuestro país se merece y necesita», señaló el presidente en una escueta intervención de cierre en la tribuna de oradores.
Sánchez concluyó así una intervención que empezó haciendo hincapié en su estrategia de arrinconar al PP por su «indecente abstención» comparando al actual líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, con su predecesor, Pablo Casado, y el momento de «lucidez» que tuvo al votar en contra de la primera moción de censura de Vox en 2020.
El jefe del Ejecutivo recordó e hizo suyas las palabras de Casado a Vox en esa primera moción: «No es que no nos atrevamos, es que no queremos ser como ustedes». Y se preguntó: «¿Qué dice hoy el líder del PP? Calla con su silencio, lo dice todo. El PP pasa de un decente ‘no’ a una incidente abstención. No puede ponerse de perfil. No se puede ser indiferentes ante un fraude constitucional como el que hemos visto estos dos días». Como ocurrió en la primera jornada del debate de la moción, ésta fue la idea fuerza del Gobierno y el partido en aras de utilizar «esta moción de tierra quemada» como elemento de erosión al PP que le arrebata la primera posición en todas las encuestas salvo la del CIS.
Justo antes del presidente del Gobierno, el portavoz parlamentario del PSOE, Patxi López, ejerció de telonero desplegando con fervor el argumentario. «Hoy el PP se va a abstener porque su futuro depende de Vox. Vox no es cualquier cosa… es la negación de la violencia machista. Y ustedes, señorías del PP, se van a abstener…». Y así siguió reprochando al PP su abstención ante la iniciativa de una formación que «busca impedir los avances en igualdad entre hombre y mujeres, que niega el cambio climático, que quiere acabar con la España de las autonomías, que añora la España más negra… Y ustedes, señores del PP, se abstienen…». Y concluyó vociferando y aplaudido por la bancada socialista: «Si eres neutral en situaciones de injusticia, es que has elegido el lado del opresor».
Previamente, la portavoz del PP, Cuca Gamarra, intentó desmontar el argumentario socialista en la primera intervención de la mañana. «Su única competencia es atacar a Feijóo. Ha tenido más reproches para el PP que para su adversario político… Lo que revela es que ya ven mas a Feijóo como presidente que a Pedro Sánchez. Y hacen bien porque está ya muy cerca». La portavoz popular argumentó que votarán en contra «por respeto a los españoles» y no votarán en contra «por respeto a usted, señor Tamames», a quien profesó su afecto personal.
En clave interna, el Gobierno de coalición mostró menos solidez que la víspera. Tras el silencio de las ministras Irene Montero y Ione Belarra en el primer día de la moción, apenas veinticuatro horas después, la ministra de Igualdad pidió «demostrar con hechos» lo que defendieron bien el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta, Yolanda Díaz. «Defendieron bien la tarea del Gobierno y ahora toca pasar de las palabras a los hechos, reforzar esa mayoría de gobierno que la derecha y la ultraderecha se empeñan en romper». Y mostró una aparente mano tendida a Yolanda Díaz. «Lo que le hemos propuesto es llegar a un acuerdo. El partido que está montando Yolanda con el partido comunista o Más Madrid es diferente a Podemos pero queremos ir juntas a las elecciones y para eso lo que necesitamos es unas primarias para acudir juntos y juntas».
