Vox cree que «hay partido» en siete regiones y aspira a condicionar alcaldías clave el 28-M
El partido que preside Santiago Abascal contará con cuatro caravanas conducidas por sus dirigentes, que harán campaña por toda la ‘España de las carreteras’
El presidente de Vox, Santiago Abascal, presenta a los candidatos en Madrid para las elecciones del 28-M. | Europa Press
«Hay partido en siete regiones». Ese es el pronóstico que la dirección nacional de Vox hace de cara a las elecciones autonómicas del próximo 28 de mayo, donde confían en ser determinantes. En cuanto a las municipales, tal y como trasladan fuentes de Bambú a THE OBJECTIVE, los de Santiago Abascal aspiran a condicionar alcaldías clave como Ciudad Real, Murcia, Sevilla, Toledo y Valencia. Ahí pretenden gobernar en coalición, aunque avisan al PP: «No vamos a regalar nada; nuestros votantes quieren que cambiemos las políticas» de la izquierda.
«Vamos a jugar el partido en todos los sitios», apuntan desde la cúpula, aunque señalan Baleares, Ceuta, Castilla-La Mancha, Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana, Extremadura y Murcia como lugares con posibilidad de gobierno, mientras que admiten que «está más complicado» en Aragón, Asturias, Canarias, Cantabria, Navarra y La Rioja. En esta última región «están cambiando las cosas a gran velocidad», por lo que no descartan meterse en el partido en la prórroga.
Desde la formación conservadora basan estas proyecciones en «datos» internos, aunque aseguran que no han «pagado por ninguna encuesta». Además, se fundamentan en su percepción de que «son las primeras elecciones a las que concurrimos como un partido nacional de verdad», y así se evidencia en que han multiplicado sus candidaturas municipales un 160%: de 752 a 1936.
La ‘España de las carreteras’
Las elecciones del próximo 28 de mayo se antojan cruciales para Vox, pues un buen resultado que se materialice en la conformación de gobiernos autonómicos podría ser la antesala de una futurible llegada a La Moncloa. Es por eso que anuncian que la campaña electoral contará con cuatro caravanas principales que recorrerán las «zonas más olvidadas» [la España de las carreteras] y que estarán encabezadas por Santiago Abascal, Ignacio Garriga, Iván Espinosa de los Monteros y Jorge Buxadé.
A estas se sumarán cuatro adicionales, que tendrán un recorrido meramente regional: la de los candidatos a la Comunidad y a la alcaldía de Madrid, Rocío Monasterio y Javier Ortega, la del vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo, y la del secretario general del Grupo Parlamentario y diputado por Asturias, José María Figaredo.
Estos serán los cabecillas de una campaña en la que, adelantan, «no habrá sorpresas» porque «se defenderá todo lo que se ha defendido hasta la fecha». Seguridad, educación, energía, servicios públicos, fiscalidad, empleo, reindustrialización o agua serán los ejes en torno a los cuales oscilará el programa electoral de sus candidatos, que «no será el mismo para todos los municipios pese a lo que diga El País».
La campaña abre en Valencia
En toda una declaración de intenciones, Santiago Abascal abrirá la campaña el viernes 12 en la plaza del Ayuntamiento de Valencia. Tal y como adelantó este medio, desde Vox se han fijado como prioridad replicar el pacto de Castilla y León en la Comunidad Valenciana. Desde la dirección nacional no adelantan dónde se cerrará la campaña, aunque todo apunta a que será en Madrid. Ahí admiten tener más posibilidades en el Ayuntamiento que en la Asamblea: «Ayuso está más fuerte que Almeida».
Aunque desde Bambú aseguran que si de ellos depende no se conformarán gobiernos de «socialistas, comunistas y separatistas», señalan a que esto dependerá en última instancia de si el Partido Popular está dispuesto a adoptar algunas medidas programáticas de Vox, negando que esto pueda tildarse de «bloqueo». «¿Y si somos el partido más votado en Ceuta quién sería el que bloquea? Los votantes quieren que cambiemos las políticas», zanjan.
