Alfonso Guerra: «Illa parece encantado con ser presidente al precio de la insolidaridad»
Sobre la situación en Venezuela, el socialista asegura que «escandaliza el silencio cómplice de Zapatero»
La conocida como financiación singular catalana no sólo ha provocado la reacción negativa de los partidos de la oposición; también ha desatado las críticas dentro del propio Partido Socialista. Al principio, fueron los dirigentes del partido en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Parge, en Aragón, Javier Lambán, y en Extremadura, Miguel Ángel Gallardo.
El expresidente socialista Felipe González compartió su opinión, alineada con la de los tres anteriores, sobre el concierto catalán: «Me siento muy muy cerca de García-Page, de Lambán y de Gallardo. Muy muy cerca y muy solidario». Ahora, el que fuera su mano derecha en Moncloa y Ferraz, Alfonso Guerra, también se ha sumado a las críticas en una entrevista concedida a El Mundo.
«El acuerdo con los independentistas de Cataluña destruye la concepción del Estado que establece la Constitución de 1978. Y lo hace de manera fraudulenta, sin atenerse a las reglas exigidas para cambiar la Constitución», ha respondido al ser preguntado por las consecuencias del acuerdo con los independentistas catalanes. El exvicepresidente, además, cree que esto es un camino «hacia la independencia de Cataluña».
Para Guerra, «el objetivo inmediato» de este acuerdo es «favorecer a una comunidad en detrimento de las demás», por lo que «es muy grave que no haya una respuesta contundente». «Los socialistas no pueden apoyar un latrocinio que elimine la solidaridad entre los españoles; los socialistas no pueden amparar la desigualdad», ha advertido, tras lamentar que «Illa parece encantado con ser presidente al precio de la insolidaridad que le ha fijado el separatismo».
«Escandaliza el silencio cómplice de Zapatero» sobre Venezuela
Al ser preguntado por las elecciones venezolanas, Guerra tiene claro que «en Venezuela ha triunfado la democracia, pero la respuesta de la tiranía de Maduro es negarse a entregar el poder». El socialista considera que la dilación en entregar las actas de votación «apunta a que las están falsificando».
«Ha llegado el momento en el que todos los gobiernos democráticos presionen para que el dictador entregue el poder a la oposición, ganadora de las elecciones. Cuando hasta líderes de izquierda populista como Cristina Kirchner o Gustavo Petro reclaman transparencia a Maduro, escandaliza el silencio cómplice de Zapatero», ha sentenciado.
Ha asegurado que el querer «hacer pasar a Maduro como un político revolucionario progresista» está «deteriorando a la izquierda en América y en Europa». «Que un expresidente español apoye a un sátrapa nunca puede tener una explicación decente», ha finalizado, en alusión a José Luis Rodríguez Zapatero.