Dimite el jefe del programa 8x8 'Dragón' en Defensa al ver que no llegan los blindados
Defensa confirma que el coronel encargado de los VCR para el Ejército de Tierra ha pedido el relevo a petición propia
Dos blindados del programa 8x8 Dragón del Ejército de Tierra. | Joaquin Corchero (Europa Press)
El coronel Vicente Infante, actual responsable del programa del Vehículo de Combate sobre Ruedas (VCR) 8×8 ‘Dragón’ dentro de la Dirección General de Armamento y Material (DGAM), ha solicitado el relevo en dicho destino a petición propia tras «haber cumplido el tiempo de mínima permanencia y la continuación en la situación de reserva», según ha adelantado la web especializada Infodefensa y han confirmado fuentes del departamento de Margarita Robles a THE OBJECTIVE.
Así pues, el Ministerio de Defensa tendrá que buscar ahora un sustituto para gestionar este programa de vital importancia para el Ejército de Tierra y que está dando importantes quebraderos de cabeza al Gobierno. El programa del VCR 8×8 se lleva desde la DGAM. En concreto, por la Subdirección General de Programas, que aglutina los grandes proyectos -y los más complejos- de adquisiciones para la modernización de las Fuerzas Armadas.
Indra tomó a finales de octubre una posición de control de Tess Defence, el consorcio del que la compañía forma parte junto a Escribano, Sapa Placencia y Santa Bárbara Sistemas, por casi 107 millones de euros para dirigir el programa del 8×8 ‘Dragón’, según informó la compañía en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Este consorcio es el encargado de la producción de 348 vehículos de combate sobre ruedas para el Ejército de Tierra en el marco de un contrato valorado en unos 2.500 millones de euros y el cual ha generado la inquietud manifiesta del Ministerio de Defensa debido a los diversos retrasos que ha sufrido el proyecto.
«Indra ha llegado a un acuerdo con el resto de accionistas de Tess Defence (…) para incrementar su participación en Tess desde el 24,67% actual hasta el 51,01%, quedando el resto de capital social distribuido de la siguiente forma: Santa Bárbara Sistemas (16,33%); Escribano Mechanical & Engineering (16,33%) y SAPA Operaciones (16,33%). El importe acordado por la adquisición del 26,34% del capital social de Tess es de 106,7 millones de euros», se detalló hace poco más de un mes.
El problema es que a falta de quince días para que termine el año, Tess no ha entregado ninguno de los vehículos previstos, así que esta dimisión del coronel Infante es un indicio de que el Ministerio de Defensa va a confirmar en los próximos días que no espera la recepción de la entrega prevista para este 2024.
El objetivo principal con la entrada de Indra en el programa fue agilizar la entrega de las unidades comprometidas con el Ministerio de Defensa mediante la posición de control de la tecnológica, con lo cual se espera mejorar la coordinación del proyecto, que acumula múltiples retrasos.
De hecho, a comienzos de este año Robles advirtió a las empresas que configuran Tess Defence de que los posibles incumplimientos del contrato conllevarían «consecuencias». El Ministerio de Defensa firmó en 2020 el contrato de suministro de fabricación de los vehículos 8×8 ‘Dragón’ con el consorcio, si bien la compra de estos vehículos está en marcha desde 2007, pero se fue retrasando por diversos motivos.
El propio contrato firmado en 2020 ya contemplaba que serían entregados de forma progresiva hasta el año 2030, pero los años van pasando sin que Defensa reciba ni uno de los blindados prometidos. El consejero delegado de Indra, José Vicente de los Mozos, aseguró que la entrega del 8×8 ‘Dragón’ sería una «prioridad» para su compañía.
Una de las consecuencias de incumplimiento de los plazos de entrega de los blindados 8×8 ‘Dragón’ es que ha obligado a España a seguir contando con los obsoletos vehículos BMR en apoyo del contingente militar desplegado en Líbano. Con 44 años de antigüedad y a la espera de ser sustituidos por los nuevos blindados ‘Dragón’ que se construyen en la factoría asturiana de Santa Bárbara, la demora ha dejado expuestos durante este año a los más de 600 militares en el ‘polvorín’ de Oriente Próximo.
En la actualidad, se siguen suscribiendo millonarios contratos de mantenimiento para que los viejos BMR aguanten unos años más a la espera del relevo. En paralelo, siete 8×8 ‘Dragón‘ fueron presentados a finales de 2022 para ser probados, pero el Ejército ya tenía que disponer de otros 34. La previsión para este 2024 era que estuviesen listos otros 70 más, pero los plazos se han vuelto a quedar en papel mojado.
Un macrocontrato de 2.420 millones
Defensa adjudicó el agosto de 2020 el macrocontrato para la construcción y entrega de 348 blindados 8×8 ‘Dragón’. El importe superó los 2.000 millones y en abril del año pasado se aprobaron otros 420 millones. El pliego, con la vista puesta en el desarrollo de la industria tecnológica española, recayó en las firmas Santa Bárbara, Sapa, Escribano e Indra. Lo que parecía una buena noticia se han convertido en un calvario para Defensa, que no se está dispuesta a poner fin al contrato pese a los incumplimientos, pero tampoco a pasar por alto los efectos de los retrasos.
El departamento que dirige Robles ha mostrado un profundo malestar en el desarrollo del programa estrella del Ejército de Tierra y el desarrollo de las entregas. Los blindados 8×8 ‘Dragón’, que tendrán un coste unitario de 5,9 millones, pretenden ser claves en la modernización del Ejército de cara a 2035. Pese a que ya se han ejecutado importantes desembolsos, oficialmente solo hay constancia de la presentación de siete vehículos 8×8 ‘Dragón‘ en diciembre de 2022.
