Ayuso diluye la Oficina del Español tres años después de su polémica creación para Cantó
La Comunidad de Madrid la integró en la Dirección General de Patrimonio Cultural y ahora se ha hecho efectivo
La Oficina del Español de la Comunidad de Madrid dejará de existir de la misma forma en la que se planteó en 2021. Tal y como ha adelantado El Confidencial y ha podido confirmar THE OBJECTIVE en fuentes del Gobierno autonómico, Ramiro Villapadierna, su último director, cesó del cargo el pasado 10 de diciembre, lo que supone la disolución definitiva del organismo como tal.
La oficina fue muy criticada por la oposición, quien la señalaba de «chiringuito», ya que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, la creó en 2021 para que la pilotara Toni Cantó tras su marcha de Ciudadanos. Con el tiempo, se fue diluyendo hasta terminar, tres años después, integrada en la Dirección General de Patrimonio Cultural. Esta unidad pasa a llamarse ahora Dirección General de Patrimonio Cultural y Oficina del Español.
El cierre de la Oficina del Español ha sido ‘historia de una muerte anunciada’, ya que el Gobierno regional hizo una reestructuración en diciembre del año pasado y la incorporó en la Dirección General de Patrimonio Cultural. Sin embargo, Villapadierna continuó trabajando para la Consejería de Cultura y cobrando un sueldo de 78.708,94 euros anuales, según ha podido saber el citado diario a través del portal de transparencia autonómico.
Es por ello que el exdirector ha estado en una especie de limbo en los últimos meses: continuaba en su cargo, pero la oficina ya no existía tal y como estaba planteada. Aunque la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes ha detallado a El Confidencial una serie de actividades en las que participó y ayudó a organizar, la agenda del portal de transparencia sólo refleja dos reuniones en los últimos meses: una en septiembre y otra en julio.
La principal aportación de la Oficina del Español se produjo en octubre con un seminario internacional sobre descolonización al que se invitó a expertos iberoamericanos como el nicaragüense Sergio Ramírez y el argentino Carlos Malamud. Con este simposio se intentó contrarrestar la polémica petición de la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, de que España pida perdón por la conquista o la nueva narrativa indigenista que promueve el Ministerio de Cultura que dirige Ernest Urtasun.
El seminario tuvo por nombre Cómo acabar de una vez por todas con el mestizaje y reunió tanto en la Consejería madrileña de Cultura como en la Real Academia de la Lengua (RAE) a algunos de los expertos en la materia. Además, se inauguró también en Casa de América la exposición La Ruta del Mantón, un «entretejido entre culturas de tres continentes» sobre esta pieza cuadrada o rectangular de abrigo que se echa sobre los hombros, cuyo origen es chino y que llegó a Madrid desde Filipinas cuando este último archipiélago era una colonia española.
«La Hispanidad no la romperá ni la ignorancia ni el fanatismo»
Ayuso defendió en ese momento que México y España «están unidos fraternalmente, que es mucho más fuerte y más importante que lo político» y subrayó que la Hispanidad «no lo romperán ni la ignorancia ni el fanatismo», refiriéndose a la decisión del país centroamericano de no invitar a Felipe VI a la investidura de Sheinbaum por la falta de respuesta de España a una carta enviada en 2019, en la que México pidió que «el Estado español admita su responsabilidad histórica» por las ofensas cometidas durante la conquista y «ofrezca las disculpas o resarcimientos políticos que convengan».
«México y España están unidos fraternalmente y lo fraternal es mucho más fuerte y más importante que lo político. Madrid es la casa de los mexicanos y lo será siempre. Esta familia, que es la Hispanidad, no lo romperán ni la ignorancia ni el fanatismo», recalcó la dirigente madrileña.
Ayuso recordó también que la última edición del Festival de la Hispanidad tuvo a México como país invitado de esta edición de 2024. «Cuando presentamos el cartel no pudimos imaginar lo importante que sería tener como país invitado en esta ocasión a México, que lo llevamos en el corazón», señaló tras la polémica decisión de Sheinbaum.