«Lo que menos me importaba era el puto virus»: el libro del alcalde pillado borracho en pandemia
Álex Pastor dimitió como regidor de Badalona tras conducir bajo los efectos del alcohol y morder a un agente
El alcalde de Badalona durante la pandemia, Álex Pastor, en un fotograma de los informativos de TVE. | RTVE
La madrugada del 21 de abril de 2020 cambió radicalmente la vida del entonces alcalde de Badalona, Álex Pastor. De la noche a la mañana tuvo que dejar su cargo tras ser detenido por la policía por conducir borracho en pleno confinamiento por la pandemia de covid-19. Su caso apareció en la mayoría de informativos de España, el PSC le suspendió de militancia y sus socios le retiraron la confianza en el consistorio. Ahora, más de cinco años después, se abre en canal en un libro en el que explica sus problemas de alcoholismo, la depresión que sufría y su tormentosa vida tras el divorcio de su mujer: «Lo que menos me importaba era el puto virus», afirma en el marco de su sonada detención y la repercusión posterior.
Pastor ha escrito el libro Fuego. Del alcalde en la cima a juguete roto. La historia que no querían que contara -que se puede comprar en la distribuidora Amazon– en el que aborda aquel episodio, sus problemas con el alcohol y su doble vida: alcalde de día, adicto de noche. Tras enfrentarse a la policía por pararle durante el confinamiento y morder a uno de los agentes, pasó la noche en el calabozo. Los «acontecimientos» vividos —y sufridos— esa madrugada le hacen confesar que, en realidad, el patógeno había dejado de importarle, porque las consecuencias de sus actos iban a ser mucho peores.
El entonces alcalde socialista de Badalona pasaba un momento de crisis en su vida personal. Según explica, se encontraba durmiendo en un «habitáculo apestoso y oscuro» lejos del «calor de su hogar». Estaba en pleno divorcio de su mujer. El conflicto con la policía fue público y notorio, y en el calabozo intentó calmarse, pero no era capaz de acordarse de todo lo que ocurrió. El alcohol le jugaba una mala pasada.
«Había arrasado con todo»
«Tenía la testosterona disparada. Lo sabía. Se me habían cruzado los cables de una forma que ni yo creía posible. Aquel era yo, pero no había sido yo quien pilotaba la nave de mi mente. Eso estaba claro. Necesitaba entender qué demonios había pasado esa noche, pero me costaba pensar. Todo un tsunami con consecuencias devastadoras. Había arrasado con todo», explica en su libro.
Pastor también asegura que «todos» intentaban «matarle políticamente», pero que él solo se precipitó al suicidio político: «Tendrían que darme el premio al idiota del año —pensé en voz alta. He caído por gilipollas. Todos intentándome matar y voy yo y me suicidio políticamente».
Salud mental
En ese calabozo, lo primero que le pasó por la cabeza fue qué pensarían sus hijas y su madre. Sabía que, con la detención, los vídeos y las redes sociales, toda la ciudad hablaría de la detención de su alcalde. «¿Qué les habrá pasado a mi madre y a mis hijas al enterarse? Mi desesperación creció y me metí en un bucle sin respuesta».
Lo que cuenta Pastor cinco años después de aquel incidente es que estaba también inmerso en una depresión. «Mientras esperaba que empezaran las preguntas, mi mente dispersa se dedicó a viajar como siempre, buscando distracciones absurdas para rellenar los momentos vacíos de la realidad. Pensé en cuántas veces había salido de casa con una sonrisa puesta, como si fuera un disfraz que me protegiera de lo demás, pero que a la vez me hacía sentir más falso que un billete de Monopoly. Vivía en una disonancia cognitiva eterna».
El episodio de esa noche de conducción y alcohol en plena pandemia era solo la punta del iceberg de lo que atribuye a problemas mayores de salud mental. De un día para otro se dio cuenta de que había tirado por la borda su carrera política. «Pensé en lo irónico que era todo: años luchando por construir una reputación, una vida ‘perfecta’, y todo se había desmoronada en una noche».
En Fuego, el que fuera primer edil de Badalona de 2018 a 2020 revisa su vida entera, sus pesadillas y sus traumas infantiles, su necesidad de ser un modelo para sus hijas y haber fracasado, las rivalidades políticas y, finalmente, su redención. Con la publicación del libro, Pastor asegura haber superado sus problemas de salud y de adicción. Dice que ha recuperado su militancia en el PSC.