La Justicia australiana ordena detener al cardenal Pell, condenado por pederastia

Un tribunal de Melbourne ha ordenado este miércoles la detención del cardenal australiano George Pell, ya ex número tres del Vaticano después de que el martes fuera suspendido oficialmente tras hacerse pública su culpabilidad por pederastia, mientras espera que se emita la sentencia firme.

Durante una audiencia previa a la sentencia, los fiscales han declarado este miércoles que Pell se enfrenta a un máximo de 50 años de cárcel, 10 años por cada uno de los cinco cargos de agresión sexual contra dos monaguillos de la Catedral de San Patricio de Melbourne en 1996 y 1997.

Tras el anuncio para que fuera detención, el exarzobispo de Melbourne y de Sidney se ha inclinado ante el juez y ha sido llevado, sin esposar, fuera de la sala de audiencias.

El cardenal, de 77 años, fue declarado culpable el 11 de diciembre de un cargo de agresión sexual y de otros cuatro cargos de atentado al pudor contra dos monaguillos de 12 y 13 años en 1996 y 1997, en la sacristía de la Catedral de San Patricio de Melbourne, de la que Pell era el arzobispo. Por motivos legales, este veredicto no se hizo público hasta este martes.

Los abogados del prelado lograron que su detención, que habría debido producirse en diciembre, se aplazara debido a la doble operación de rodillas a la que debía someterse.

Su defensa debía solicitar en un primer momento al tribunal de apelaciones una nueva libertad bajo fianza, a la espera del juicio en apelación. Pero al final renunció, indicando que pensaba «apropiado que espere a conocer su pena» bajo custodia. El 13 de marzo está prevista una audiencia en este sentido.

Poco antes, el juez Peter Kidd ha considerado «evidente» la «falta» del extitular de la Secretaría de Economía del Vaticano. «Es un crimen cruel y vergonzoso«, ha dicho el magistrado. «Implicó un abuso de confianza. Se aprovechó de dos jóvenes muchachos vulnerables», informa AFP.