A juicio tres policías que mataron a un joven, para los que Fiscalía pide 2,5 años de cárcel
La acusación que ejerce la madre del fallecido solicita una condena de diez años para cada uno y una indemnización
La Audiencia Provincial de Madrid juzgará la próxima semana a tres policías nacionales que abatieron a tiros a un joven en 2021 en el distrito madrileño de Puente de Vallecas, para los que la Fiscalía pide dos años y medio de cárcel por homicidio con la eximente incompleta de legítima defensa. Según ha informado la Fiscalía, está previsto que el juicio con jurado comience el próximo viernes, día 8, en la sección segunda de la audiencia madrileña.
El suceso tuvo lugar la noche del 26 de noviembre de 2021 en la casa de Kevin Bryan P., cuya madre llamó a la policía alertando de que el joven, de 21 años, estaba amenazando a la familia con un cuchillo. A la llegada de los agentes el joven trató de agredirles con el arma blanca reiteradamente, y los agentes le dispararon varias veces causándole la muerte.
De cara al juicio la Fiscalía pide que cada agente sea condenado a seis años y medio de cárcel como coautor de un delito de homicidio pero con eximente incompleta de legítima defensa, debido a que el joven no paraba de atacarles y temieron por su vida. También solicita que indemnicen a la madre del fallecido con 75.000 euros y al hermano con 25.000.
La petición de la Fiscalía ha variado a lo largo del proceso, ya que inicialmente solicitó que los agentes fueran condenados por homicidio con la citada eximente incompleta, pero en marzo de 2023 solicitó el archivo de la causa al apreciar, tras valorar nuevos informes, que concurría una eximente completa en su acción.
Después de que la Audiencia Provincial rechazara exculpar a los agentes, el Ministerio Público vuelve a pedir que sean condenados, han precisado a EFE fuentes jurídicas. Según su relato, a las 21:00 horas del 6 de noviembre de 2021 los tres agentes se presentaron en un domicilio de Madrid a requerimiento de la madre y del hermano de un joven que, según ellos, estaba «muy nervioso» y les había tratado de agredir con un cuchillo.
Una vez allí los acusados accedieron al inmueble con las llaves que les habían facilitado los familiares, momento en que el Kevin Bryan P. A. «sin mediar palabra», se abalanzó sobre ellos portando un cuchillo en la mano, con el que les acometió reiteradamente.
Lo hizo «dirigiendo el cuchillo a zonas vitales de los acusados, especialmente a cabeza de los actuantes que no se hallaba protegida por el escudo, viéndose éstos obligados a retroceder como consecuencia de las embestidas que ponían en peligro sus vidas, llegando a perder el escudo y a caer al suelo».
Ya en el rellano de la vivienda los acusados mantuvieron un forcejeo con el joven, «quien no cesaba en la intención de agredir a los mismos con el cuchillo», lo que supuso un riesgo «evidente» para la vida de los policías quienes «en aras a salvaguardar su integridad», le dispararon, continúa la Fiscalía. Le dispararon tres agentes, hasta que otro policía logró reducirle.
El joven murió el mismo día de los hechos debido a la hemorragia que le causaron los seis impactos de bala que recibió de tres armas reglamentarias, explica la Fiscalía, que detalla que Kevin había consumido el día de los hechos MDMA, que potencia la agresividad. Por su parte, la acusación que ejerce la madre del fallecido solicita una condena de diez años de cárcel para cada policía, sin eximentes, y una indemnización de más de medio millón de euros para la familia.