Urs Hölze, el vicepresidente de infraestructura técnica de Google ha explicado que procesar los millones y millones de datos cada día requiere de tanta energía, que Google hace años se propuso a gastar menos combustible fósil y ayudar al medio ambiente al comprar energía renovable de las compañías eléctricas para sus centros de datos. “Somos una de las primeras corporaciones masivas con acuerdos a largo plazo para comprar energía renovable directamente”, ha informado. El primer acuerdo de energía renovable lo firmó Google en 2010. Desde entonces, el precio de la energía renovable ha bajado y esto ha hecho de este tipo de electricidad la más eficaz para la empresa. Google gastará un total de 3.500 millones de dólares a nivel global en el desarrollo de su infraestructura para distribuir esta energía.