Durante la cita se analizaron las propuestas sobre la creación de tres áreas marinas protegidas que en total abarcan más de cinco millones de kilómetros cuadrados en aguas antárticas.
Sin embargo, el grupo solo aprobó la propuesta de Estados Unidos y Nueva Zelanda centrada en la protección del Mar de Ross, mientras que los restantes planes se seguirán negociando en próximas reuniones. «El acuerdo de hoy supone un hito en la protección de la Antártida y el océano antártico. Más de 1,5 millones de kilómetros están destinados a la conservación, un área que equivale a Francia, España y Alemania juntos, con más del 70 por ciento con la total protección marina”, destacó el experto en océanos del Fondo Mundial para la Naturaleza WWF-Australia, Chris Johnson.
El Mar de Ross es uno de los pocos ecosistemas marinos intactos del mundo en el que habitan un tercio de los pingüinos Adélie del planeta, un cuarto de la población de los pingüinos emperador, además de petreles antárticos, focas Wedell, merluzas negras y una especie única de orca, entre otras especies. El océano Antártico alberga más de 10.000 especies únicas, entre ellas la mayoría de la comunidad mundial de pingüinos, ballenas, aves marinas, el calamar gigante y el bacalao austral, pescado que se ha convertido en el blanco principal de las compañías pesqueras que operan en la región.