Mientras Holanda celebra sus elecciones presidenciales y se encuentra en plena crisis política con Turquía, el presidente turco, Racep Tayyip Erdogan, ha vuelto a atacar violentamente este miércoles a Holanda, acusándola de ser responsable de la masacre de Srebrenica, y ha asegurado que “el espíritu del fascismo está desbocado” en Europa. Holanda “no tiene nada que ver con la civilización, ni con el mundo moderno, fueron ellos los que masacraron a más de 8.000 bosnios musulmanes en Bosnia Herzegovina, durante la masacre de Srebrenica”, un enclave que estaba bajo protección de los cascos azules de la ONU holandeses, ha declarado Erdogan durante un discurso.