Me alegra que el demonio se muestre. Es conocida la frase de Baudelaire que dice que la mayor astucia de satán es hacernos creer que no existe.
¿Te imaginas que llega a tu casa un sobre a tu nombre invitándote cordialmente a la boda de tu amiga bajo el rito satánico? Yo no voy ni loca, lo siento bonita pero yo a tu boda no voy.
Hace dos horas que he apagado el ordenador. Por el momento no ha sucedido nada, pero no desespero, hay que ser paciente, no va a funcionar esto al primer intento.
Estados Unidos no deja de sorprenderme. No porque su presidente haga de monologuista en una cena de corresponsales, lanzando chistes sobre los problemillas con el software de su Obamacare o con trabajar en el Congreso.
En mi juventud, al ir a una manifestación, había que llevar calzado deportivo, para salir echando viruta si cargaban los grises