La fotografía de la mujer morena, presumiblemente malagueña, vestida de flamenca con un entallado traje blanco y faralaes amarillos mira al suelo como pensativa en un gesto de alegría contenida.
Rafa mantiene su esencia sin que la vanidad forme parte de su curriculum
Esta imagen me hace pensar en el momento en el que alguien que sabe que ya no tiene manera de escapar decide que en lugar de intentar negociar una salida, ése será su último día