Lectura

El hogar de Europa

El hogar de Europa

“A leer se aprende en la escuela, pero a leer de verdad aprende uno poco a poco, en la intimidad de su confinamiento o, socialmente, en las librerías y en las bibliotecas”

Lápices

Lápices

“Hay algo casi vergonzante en el hecho de volver a un libro anotado quién sabe si en la adolescencia o en nuestra primera juventud, al comprobar que ya no somos aquel que fuimos”

El caso Simenon

El caso Simenon

“Esa experiencia me ha demostrado que la lectura electrónica y la lectura física o sensual se complementan pues cubren dos espectros muy distintos de la disponibilidad del lector hacia la lectura”

Otro regalo de Jabois

Otro regalo de Jabois

Mañana llega a las librerías una novela de Manuel Jabois, ‘Malaherba’ (Alfaguara), y los que ya la hemos leído somos conscientes de nuestro privilegio. Es ni más ni menos que otro regalo de este periodista y escritor rebosante de dones.

Los libros que nunca leemos

Los libros que nunca leemos

“Es la época en que el alpinista sueña con la montaña que pronto escalará, y también el Buen Lector elige su montaña para dejarse la piel en ella”, prosigue el escritor italiano. Es lógico pensar que de este fragmento surge la conocida metáfora alpina –los ochomiles de la literatura como los libros ilegibles– pero, ¿a qué obras se refiere?

Ser mujer es una herida abierta

Ser mujer es una herida abierta

Casualmente, esta columna se leerá un 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Y también, fortuitamente, yo he terminado de leer un libro tan radicalmente femenino que, naturalmente, se convierte en universal. Se trata de Primera persona, la obra de la colombiana Margarita García Robayo que acaba de ser publicada por la Editorial Tránsito.

Bergsveinn Birgisson o cómo un hombre destruyó su vida por rechazar a la mujer que amó siempre

Bergsveinn Birgisson o cómo un hombre destruyó su vida por rechazar a la mujer que amó siempre

Hay que ver lo poco que sabemos sobre Islandia: las canciones de Björk, las celebraciones vikingas de su selección de fútbol, sus prisiones llenas de banqueros. Qué poco sabemos, más bien nada, sobre cómo desayunan, cómo visten, ¿se enamoran igual? Entrevistar a un autor islandés como Bergsveinn Birgisson, quien en realidad vive en Noruega pero ambienta esta novela suya –Para Helga (Lumen)– entre la Islandia rural y la urbana, es una oportunidad para resolver algunos misterios. Sin embargo, obviamos la topografía por completo y nos zambullimos en cuestiones más porosas.

Bergsveinn Birgisson o cómo un hombre destruyó su vida por rechazar a la mujer que amó siempre

Bergsveinn Birgisson o cómo un hombre destruyó su vida por rechazar a la mujer que amó siempre

Hay que ver lo poco que sabemos sobre Islandia: las canciones de Björk, las celebraciones vikingas de su selección de fútbol, sus prisiones llenas de banqueros. Qué poco sabemos, más bien nada, sobre cómo desayunan, cómo visten, ¿se enamoran igual? Entrevistar a un autor islandés como Bergsveinn Birgisson, quien en realidad vive en Noruega pero ambienta esta novela suya –Para Helga (Lumen)– entre la Islandia rural y la urbana, es una oportunidad para resolver algunos misterios. Sin embargo, obviamos la topografía por completo y nos zambullimos en cuestiones más porosas.

Por qué leer

Por qué leer

Qué fácil es educar a los hijos de los demás. Sus niños siempre son ruidosos porque nadie les ha puesto límites, o no saludan porque sus padres no les han inculcado buena educación. Otros escritores de éxito escriben libros de éxito porque se pliegan a los gustos de la masa, o escriben libros de no-éxito porque pretenden ser puros e intelectuales. Un amigo es puntilloso, demasiado, y quizá lo es demasiado porque obviamente, nosotros lo somos demasiado poco.

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