El texto, apoyado por la ministra de Justicia, Ayelet Shaked, y el de Seguridad Interior, Gilad Erdan, autoriza a los tribunales a ordenar a sitios como Facebook, YouTube o Google suprimir ciertos contenidos, ha informado la ministra en un comunicado. Esta medida podría aplicarse a contenidos subidos a la red que representen «un peligro real para la seguridad de un individuo, la pública o la del país», explica el comunicado. «La nueva ley es indispensable para disponer de herramientas que permitan actuar inmediatamente para retirar contenidos que puedan alentar actos de terrorismo o asesinatos», subrayó por su parte Erdan.
El texto suscita inquietud entre las ONGs y los palestinos, que temen que el mismo atente contra la libertad de expresión e información. Según el Instituto para la democracia en Israel, este proyecto «no tiene precedentes» en su forma actual comparado con las legislaciones de otros países en el mundo. Afirma que teme que «facilite un nivel de censura desproporcionado». Los palestinos, por su parte, temen que esta campaña conduzca hacia una censura de la información y sospechan que Israel se encuentra detrás del cierre de dos cuentas ocurrido en setiembre pasado.