¿Qué hacer si te encuentras un perro perdido o abandonado en la calle?

Desde hace unos cuantos años, el abandono es el principal problema de bienestar de los animales de compañía en España. Cada año se abandonan más de 100.000 perros de forma definitiva, siendo las camadas no deseadas el principal motivo de abandono. Las cifras de adopciones tampoco son muy alentadoras. Se calcula que solo un 40% de los animales abandonados consigue después un hogar definitivo. Las protectoras tienen un nivel de ocupación promedio del 87%, cercano a la saturación. 

Sin embargo, no todos los perros que deambulan solos por la calle han sido abandonados, algunos están solo temporalmente perdidos. Según el último estudio de la Fundación Affinity, “el 25% de los perros recogidos por refugios y protectoras de animales fueron devueltos a sus propietarios”, principalmente, gracias al microchip.

El Capítulo VI del Código de Protección y Bienestar Animal establece en su Artículo 27 que se considera animal abandonado “aquel que no lleve alguna acreditación que lo identifique ni vaya acompañado de persona alguna”. Se considera, en cambio, animal perdido aquel que, aun portando su identificación, circule libremente sin acompañante. En este caso, “se notificará esta circunstancia al propietario y éste dispondrá de un plazo de cinco días para recuperarlo, abonando previamente los gastos que haya originado su atención y mantenimiento”. Si transcurrido el plazo el propietario no hubiera procedido a retirar al animal, este pasará a considerarse abandonado. Sea cual sea el motivo, un perro no debe estar nunca solo en la calle. Si te encuentras con uno, ¿sabrías cómo ayudarlo?

¿Qué hacer si te encuentras un perro perdido o abandonado en la calle?

Si te encuentras un perro perdido o abandonado en la calle, lo primero que debes hacer es contactar telefónicamente con las autoridades competentes. El Código de Protección y Bienestar Animal indica que corresponde a los Ayuntamientos la recogida y transporte de los animales perdidos o abandonados por sus propietarios. Y establece que el servicio de recogida y transporte de animales deberá estar disponible las 24 horas del día los 365 días del año y deberá efectuarse por personal “debidamente capacitado a fin de no causar daños, sufrimientos o estrés innecesarios a los animales”. 

Desde cualquier teléfono puedes llamar de forma gratuita al 112, número de asistencia a la ciudadanía ante cualquier tipo de emergencia. Si no, puedes ponerte en contacto también con la Guardia Civil a través del 062. La ubicación exacta del perro, el tipo de raza y el estado general en el que se encuentra suele ser información suficiente para activar el protocolo de rescate. Sin embargo, cuantos más detalles puedas dar a la hora de explicar la situación, mejor. No es lo mismo encontrarse a un animal tranquilo, aunque algo desorientado, que encontrarse a uno que está muy alterado, que se muestra agresivo o que necesita atención veterinaria urgente. Es importante destacar que si el animal está en efecto herido, y no tenemos conocimientos veterinarios, lo mejor es no moverlo para evitar daños mayores.

Ahora bien, si el animal tiene buen aspecto, no hay evidencia de herida o enfermedad y no se muestra agresivo, podemos intentar acercarnos. Por supuesto, manteniendo siempre la calma y sin hacer movimientos bruscos para evitar que se sienta amenazado y salga corriendo. Ofrecerle un poco de comida, agacharnos para estar a su altura y hablarle con una voz suave y un tono agudo pueden ser buenas estrategias también para ganarnos su confianza y conseguir poco a poco que se acerque e incluso que se deje poner una correa, evitando así que pueda huir mientras llega la ayuda solicitada. Es importante permanecer un tiempo prudencial en el mismo lugar donde hemos encontrado al perro por si el propietario lo estuviera buscando.