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Gastronomía

Espaguetis perfectos en la oficina: el consejo de mi abuela para evitar que se resequen

A veces, las soluciones más efectivas no vienen de la tecnología ni de técnicas sofisticadas

Espaguetis perfectos en la oficina: el consejo de mi abuela para evitar que se resequen

Plato de espaguetis. | (Canva)

Llevar comida casera al trabajo es una solución más saludable que recurrir a restaurantes o a comida rápida. Entre mis platos favoritos para el tupper de oficina, los espaguetis ocupan un lugar privilegiado. Sin embargo, recalentar pasta sin que quede reseca o apelmazada puede ser todo un reto. Por eso, este truco que me enseñó mi abuela es infalible.

La buena noticia es que existen trucos sencillos para devolverle a la pasta su textura jugosa. Y como ocurre con tantas cosas en la cocina, los mejores secretos no vienen de internet ni de libros de cocina modernos, sino de la experiencia acumulada con el paso de los años.

Espaguetis: (Canva)
Espaguetis: (Canva)

El truco de mi abuela

Según mi abuela, cuando vayas a recalentar espaguetis en el microondas, nunca los metas tal cual. En su lugar, coloca una cucharada sopera de agua sobre la pasta antes de tapar el recipiente. Después, cúbrelo con una tapa apta para microondas o, si no tienes, con un plato o incluso papel film, dejando un pequeño espacio para que salga el vapor.

De forma que, el agua añadida se convierte en vapor al calentarse, creando un ambiente húmedo dentro del recipiente que evita que los espaguetis se resequen. El calor se distribuye de manera más uniforme y la pasta queda suave, suelta, y con una textura parecida a la de la pasta recién hecha.

https://youtube.com/shorts/RCOX2NL0BR8?feature=shared

Métodos que evitan que la pasta se reseque

Hay otras formas de asegurarte de que tus espaguetis mantengan su sabor y textura al recalentar. Uno de ellos, es guardar la pasta con un poco de salsa o aceite de oliva. La pasta seca es mucho más propensa a endurecerse en el microondas. En cambio, si la mezclas bien con la salsa antes de guardarla, esa capa líquida ayudará a conservar su humedad.

También es importante no recalentarla demasiado tiempo de golpe. Es preferible calentar la pasta en intervalos de 40 segundos, removiéndola entre cada intervalo. Esto evita que algunas partes se cocinen en exceso mientras otras siguen frías.

Otro consejo útil es usar un recipiente adecuado, ya que os tuppers de vidrio suelen mantener mejor el calor y no alteran el sabor de los alimentos como a veces puede ocurrir con los de plástico.

Gracias al truco de mi abuela, ya no temo llevar espaguetis al trabajo ni me resigno a comer pasta reseca o sin sabor. Una cucharada de agua, un poco de atención al calentar, y listo: un plato que conserva la esencia del que se sirve recién hecho, con ese toque casero que tanto reconforta.

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