Corea del Norte reabre una de sus líneas de comunicación militar con el Sur
Corea del Norte y Corea del Sur han acordado este martes restaurar su línea telefónica militar directa, ha anunciado un responsable surcoreano pocos días después de la reapertura de una línea civil. Corea del Norte ha indicado durante las primeras conversaciones entre los dos países en más de dos años que la línea militar instalada en la parte occidental de la frontera está de nuevo operativa, ha precisado el viceministro surcoreano de la Unificación, Chun Hae-Sung, a los periodistas en Seúl. «Nuestro lado decidió empezar a utilizar la línea telefónica militar a partir de mañana a las 08h00», ha dicho en declaraciones recogidas por AFP.
Corea del Norte y Corea del Sur han acordado este martes restaurar su línea telefónica militar directa, ha anunciado un responsable surcoreano pocos días después de la reapertura de una línea civil. Corea del Norte ha indicado durante las primeras conversaciones entre los dos países en más de dos años que la línea militar instalada en la parte occidental de la frontera está de nuevo operativa, ha precisado el viceministro surcoreano de la Unificación, Chun Hae-Sung, a los periodistas en Seúl. «Nuestro lado decidió empezar a utilizar la línea telefónica militar a partir de mañana a las 08h00«, ha dicho en declaraciones recogidas por AFP.
El Ejército norcoreano comenzará a utilizar de nuevo esta línea el miércoles, según ha explicado la delegación del Norte a su contraparte del Sur, citado por Efe. El régimen de Pyongyang decidió dejar de utilizar esta y otras líneas de comunicación telemática con el Sur en protesta por el cierre del complejo intercoreano de Kaesong, implementado por Seúl como castigo por el desarrollo armamentístico de Pyongyang. La línea recién reactivada servía, entre otras cosas, para que ambos ejércitos notificaran movimientos de personas y mercancías en torno a Kaesong. El Norte también decidió comenzar a usar otra de las líneas telemáticas situadas en la aldea de Panmunjom, en la frontera intercoreana, la semana pasada después de que Kim Jong-un expresara en su mensaje de Año Nuevo su deseo de mejorar lazos con el Sur.
A raíz de esta predisposición, ambas Coreas, que técnicamente siguen en guerra desde hace más de 65 años, mantienen este martes su primera reunión de alto nivel en más de dos años en Panmunjom. En el encuentro, el régimen ha manifestado su intención de enviar una delegación compuesta por altos funcionarios, atletas o animadoras a los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebran a partir del 9 de febrero en el condado surcoreano de PyeongChang.
Por su parte, el Sur ha propuesto organizar conversaciones militares para rebajar la tensión transfronteriza y retomar las reuniones de familias separadas por la guerra que enfrentó a los dos países entre 1950 y 1953, aunque el Norte no se ha pronunciado al respecto. Todos estos gestos contribuyen a rebajar la tensión en la península después de un 2017 marcado por las continuas pruebas de armas norcoreanas y el tono beligerante con el que ha respondido al régimen de Pyongyang el presidente de EEUU, Donald Trump.