En España se busca a más de 5.500 personas desaparecidas, la mitad de ellas menores
De las 202.529 denuncias por desapariciones que hubo en 2019, 135.353 fueron de menores
Las fuerzas de seguridad buscan en España a 5.529 personas, de las que la mitad son menores. De ellos, destacan los 1.059 casos de desapariciones de menores extranjeros tutelados que se fugan de los centros de forma voluntaria y, en muchas ocasiones, de forma reincidente.
Son algunas de las conclusiones del cuarto informe de las personas desaparecidas sin causa aparente en España en 2019 que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha ofrecido a los medios de comunicación después de dar a conocer la situación a representantes de asociaciones como SOS Desaparecidas, Inter SOS, QSD Global y Fundación Anar. El ministro de Interior ha reunido a todas ellas una semana antes de la conmemoración, el día 9 de marzo, del Día Nacional de las Personas Desaparecidas sin causa aparente, que fijó el Congreso de los Diputados hace diez años.
«Seguimos trabajando en protocolos de actuación cada vez más eficientes y trabajando en la prevención», ha dejado claro Marlaska antes de reiterar a las familias de los desaparecidos el compromiso de Interior con este fenómeno complejo. Desde la creación en 2010 de la base de datos de desaparecidos hay registradas, hasta el 31 de diciembre, un total de 202.529 denuncias por desapariciones, de las que 135.353 fueron de menores, frente a las más de 66.700 de mayores de edad.
La radiografía presentada incorpora como novedad, en palabras de Laura López, inspectora de la Policía Nacional adscrita al centro de desaparecidos, el dato de la reincidencia, pues el total de denuncias corresponden a 121.113 personas. De ellas 23.468 desparecen en dos o más ocasiones.
Además del total de 202.529 denuncias, el informe concluye que continúan activos 5.529 casos, es decir, las fuerzas de seguridad tienen abiertas ese número de investigaciones por desapariciones y, de ellas, poco más de un 51% (2.839 casos) son de personas que en el momento de la denuncia eran menores; en 181 casos, por debajo de los 13 años.
En el grupo de desapariciones de menores destacan las ausencias voluntarias protagonizadas por menores extranjeros o nacionales fugados de centros tutelados, que ascienden desde 2010 a 1.059, y que se corresponden en los tres últimos años con la mayor afluencia de inmigración irregular y en los lugares donde existen más centros. Respecto a este colectivo de menores extranjeros tutelados, el informe dedica un apartado especial en el que detalla que se han registrado 40.918 denuncias, lo que supone más del 20% del total.
De ellas, un 76,56% han cesado, es decir, la persona ha sido localizada o se ha reintegrado en el centro del que se fugó; un 20,85% han pasado al estado «cesado-latente» (el menor ya ha cumplido la mayoría de edad o se ha cesado su tutela legal); y un 2,59% continúan activas. También referidas a menores están los denominados «secuestros parentales«, que desde 2010 ascienden a 369 casos.
En general y según las conclusiones de este cuarto informe, nueve de cada diez denuncias son por desapariciones voluntarias, en tanto que un 7% corresponden a las involuntarias. Las forzosas son el 1% del total. El 58% de denuncias corresponde a hombres y un 45% a mujeres, si bien la proporción de varones es tres veces mayor a la de mujeres si se tienen en cuenta solo los casos activos.
En relación con la duración de las desapariciones, la muestra de 2019 indica que el 64% se cesan en el plazo de una semana; un 74% en dos semanas; un 82% en un mes; y el 8% se prolongan más de seis meses y únicamente el 1,54% de las desapariciones cesadas tiene un fatal desenlace, bien por muerte natural (22%), accidente (17%), suicidio (43%) u otra causa violenta (8%). Todos los datos se refieren a hechos conocidos por Policía Nacional, Guardia Civil, así como Mossos d’Esquadra, Ertzainza y Policía Foral de Navarra.