Íñigo Onieva no se rinde con Tamara Falcó: su último paso, una 'conversión religiosa'
Aunque el entorno cercano de la marquesa insiste en que no existe ninguna posibilidad de que vuelva con el ingeniero, él no tira la toalla
Aunque el entorno cercano de Tamara Falcó insiste en que no existe ninguna posibilidad de que la marquesa de Griñón retome su relación con Íñigo Onieva, y a pesar de que ya ha pasado un mes de su ruptura, el empresario no está dispuesto a tira la toalla.
Para poder volver a enamorar a la que era su prometida, el ingeniero ha dejado de salir de fiesta (antes era habitual verle disfrutando de la noche madrileña en la discoteca de la que es socio, pero ahora apenas sale de su casa más que para ir al trabajo) y ha mandado transformar el anillo que le regaló a Tamara Falcó para hacerlo más grande y más fuerte, como su amor, tal y como te contamos en THE OBJECTIVE.
A esto se une ahora una actitud tan inesperada como sorprendente en el empresario: acercarse a la religión católica.
La ‘conversión religiosa’ de Íñigo Onieva… ¿para reconquistar a Tamara Falcó?
Así, el empresario se está refugiando en la religión desde su ruptura con la diseñadora y, a pesar de que ella misma confesó en más de una ocasión que su novio no era religioso (de hecho, ella le impuso que la acompañase a misa los domingos a cambio de que ella saliese de fiesta con él en alguna ocasión), en las últimas semanas se le ha visto visitar varias iglesias.
Pero lo más curioso es que se le ha visto manteniendo una conversación con el confesor de Tamara Falcó a las puertas de la Colegiata de San Isidro horas después de que la hija de Isabel Preysler diese el pregón del Domund en el mismo lugar. ¿Qué fue a hacer allí? ¿Acaso le está pidiendo ayuda al confesor de la chef? ¿O solo quiere acercarse a la fe para reconquistar a Tamara? ¿O realmente esta ruptura le ha acercado a Dios?
Sea como fuere, esta conversión religiosa está dando mucho que mucho que hablar, ya que muchos creen que únicamente se trata de una nueva estrategia del empresario para intentar reconquistar al amor de su vida.
¿Será suficiente para que la marquesa le perdone?
Aunque el ingeniero lo está intentando, Tamara Falcó no se plantea perdonarle. De hecho, para su entorno esta posibilidad es completamente remota. «Ninguna posibilidad de reconciliación, no existe la opción. Eso no va a pasar», asegura alguien muy cercano a la marquesa de Griñón a la revista Semana.
Así, las mismas fuentes apuntan a que ya ni siquiera hablan entre ellos: «Ella no tiene ningún tipo de contacto con él, ni tampoco con nadie que se relacione con él. Ha roto todo tipo de puentes que le comunicaban con él».
Sin embargo, como todos sabemos, el amor no entiende de razones, así que no sería de extrañar que ambos se dieran una segunda oportunidad. Él, desde luego, aún no ha perdido la esperanza ni la fe, nunca mejor dicho.