Eduardo Casanova culmina su propia debacle ante el humor de Santiago Segura
‘La Piedad’ sigue en caída libre pese al buen momento del cine patrio y ni siquiera se acerca al éxito taquillero del director de la saga ‘Padre no hay más que uno’
Eduardo Casanova no levanta cabeza, al menos en lo que al terreno profesional se refiere. Su polémica película La Piedad continúa cayendo en picado, siguiendo una clara involución desde su primer día. Ya no es solo que no se haya emitido en apenas cines españoles, tal y como te contamos en THE OBJECTIVE, sino que sus datos de facturación están por los suelos. Todo lo contrario que otro cineasta como Santiago Segura, quien cotiza al alza con sus apuestas cinematográficas.
El hecho de que no haya habido ‘piedad’ para con Casanova choca de bruces con la dulce realidad que vive el cine español, que cerró el 2022 con una taquilla de 80 millones de euros, doblando los 41 que se registraron en 2021. Un dato muy positivo y que se suma al optimismo en este sentido que se respiró durante la última edición de los Premios Goya. Allí se resaltó el aumento de espectadores en sus butacas a lo largo del 2022. Son factores que dejan claro que corren buenos momentos para el séptimo arte local.
Una gala que, por cierto, supuso otro batacazo mayúsculo para Eduardo Casanova y su película, nominada a tres galardones (mejor dirección de arte, mejor diseño de vestuario y mejor maquillaje y peluquería) de los cuales no consiguió llevarse ninguno. El polémico director buscaba reivindicar su cine de autor intimista, pero lo único que logró fue irse a casa con las manos vacías y pidiendo perdón.
Los datos que hunden a Eduardo Casanova
Sin miedo a ser demasiado crueles o taxativos, se puede hablar ya (sin miedo) de que La Piedad ha sido un rotundo fracaso. Una afirmación lapidaria que reflejan los datos. En su estreno en cines con 20 copias solo facturó 7.700 euros, lo que representa una media por copia de 385 euros.
Tan solo 2.400 personas fueron a los cines a verla en los primeros quince días de estreno, lo que se tradujo en un total de 15.589 euros de recaudación. Y no solo eso sino que ya en la segunda semana en cartelera cayó un 68% en asistencia a las salas.
Un montante pobre si se tiene en cuenta que desde el Ministerio de Cultura se hizo todo lo posible para hacerla funcionar. En total, se destinaron 317.570,33 euros de ayuda, tal y como informa dicho órgano gubernamental en las ayudas selectivas para la producción de largometrajes sobre proyecto. Pero más sangrante es todavía si se hace una sencilla división entre la subvención y los espectadores en sus primeras dos semanas. Se destinaron 132 euros de ayuda por cada persona que ha visto el último film de Eduardo Casanova.
Para entender por qué La Piedad se ha quedado lejos de lo que su creador esperaba de ella, basta con compararla con algunas de las últimas cintas españolas que sí han cumplido con las expectativas. Es el caso de Los renglones torcidos de Dios, que ha conseguido una recaudación de casi 6 millones, así como As bestas, la gran triunfadora de los Goya al ganar 9 estatuillas. El film de Sorogoyen ha disparado su facturación hasta el 125% respecto al fin de semana anterior y su acumulado es actualmente de casi 4,7 millones de euros.
Santiago Segura ‘no hay más que uno’
Es evidente que el público no ha acogido con gusto la propuesta de Eduardo Casanova. En su lugar, prefiere otros formatos más vinculados con España, sus costumbres, así como la narrativa o la comedia, con el fin de pasar un buen rato.
Es ahí donde emerge con fuerza el nombre de Santiago Segura. El actor y director es el auténtico rey Midas del cine español desde hace años. Igual que sucede con Eduardo Casanova, son los datos los que así lo confirman. La tercera entrega de su saga Padre no hay más que uno consiguió colarse en un meritorio cuarto lugar del ranking global de recaudación taquillera en 2022 con 15.606.842 euros.
En otras palabras, es la primera película española en esa clasificación, que lidera Avatar: el sentido del agua, y cuyo podio cierran Minions: el origen de Grú y Jurassic World: Dominion. Además, logró varios récords, entre los que brilla con luz propia haber sido el mejor estreno de una película española desde 2016. Con esta información en la mano, no cuesta asumir que Santiago Segura sí que ha sabido conquistar al gran público.