El mayordomo de Diana de Gales, a punto de compartir sus secretos con William y Harry
Paul Burrell fue hombre de confianza de Lady Di hasta su muerte y ahora cree que ha llegado el momento de contarle a sus hijos toda la verdad
Más de 25 años después de su muerte, Diana de Gales continúa siendo un personaje con un impacto mediático y un interés social considerables. Sobre su vida, estilo, divorcio y triste fallecimiento se han escrito infinitas líneas, unas en forma de reconocimiento a lo que fue (un icono inolvidable) y otras como hipótesis, pero eso es otra historia.
Una de las personas que más tiene que contar acerca de la legendaria princesa es su mayordomo. Paul Burrell estuvo al servicio de Lady Di durante 10 años, los suficientes como para entenderse con ella con tan solo una mirada. Durante todo este tiempo ha hecho bueno valer más por lo que ha callado, pero parece que ha llegado el momento de desvelar todo lo que sabe.
Harry y William, cerca de conocer la verdad sobre Diana de Gales
Al menos eso es lo que se destila de sus últimas palabras en una entrevista con el Mirror. El motivo de querer hablar ahora es una operación que tiene que afrontar a consecuencia del cáncer de próstata que padece. A sus 64 años, tiene miedo de que pueda pasarle algo y, por macabro que suene, no querría por nada del mundo despedirse sin haber mantenido una sincera charla con los hijos de Diana de Gales, William y Harry.
Paul Burrell ha hablado con el tabloide británico sin filtro ninguno y desde su primera intervención ya hace crecer la expectación: «Pasé muchas horas con Diana, tanto en sus momentos más felices como en los más oscuros», comienza diciendo.
Es su batalla contra el cáncer lo que le mantiene en vilo y le ha hecho romper su silencio: «Mi enfermedad ha centrado mi atención en decirles cosas a los niños antes de que sea demasiado tarde, decirles lo que realmente deberían saber». Sorprende que se refiere a William y Harry como «los niños», pero eso no hace más que probar la estrecha relación que mantenía con los hijos de Diana de Gales.
«Sé que algunas cosas no son bonitas, pero si dejo este lugar y voy a otro, nunca lo sabrán, tengo que contarles la verdad», insiste el mayordomo de la princesa, como queriéndose convencer a sí mismo.
El objetivo de Burrell
Dar un paso de este calibre no es sencillo, pero el hombre que se define como «el mejor amigo de Lady Di» busca ayudar a que los hermanos se reconcilien: «Hay cosas que sucedieron en el mundo de su madre, de las que tal vez no tengan conocimiento. Y creo que podría llenar algunos espacios en blanco», apunta.
Al mayordomo se le parte el alma al ver la fractura existente entre los hijos de su querida Diana de Gales: «Miras a Harry y William como dos niños de 11 y 14 años caminando detrás del ataúd de su madre… el país vio eso, fue testigo de eso, y nuestros corazones están rotos por esos dos chicos. Su camino debería haber sido el mismo desde entonces. Eso es lo que Diana hubiera querido, que sus dos hijos estuvieran pegados el uno al otro por el resto de sus vidas».
Y sentencia con una frase demoledora: «Su muerte debería haberlos unido para siempre, pero no fue así».
Un cebo sin premio
El interés sobre los secretos que tiene que contar una de las personas de máxima confianza a Diana de Gales a sus hijos es creciente. Sin embargo, Paul Burrell finaliza su entrevista sin desvelar ningún detalle de esa más que posible charla con William y Harry: «Si alguna vez nos sentáramos, le diría a William: ‘Esto se queda dentro de estas paredes y de aquí nunca saldrá‘».