La madre de Íñigo Onieva no puede más y decide enviar un comunicado
Carolina Molas, futura suegra de Tamara Falcó, está cansada del seguimiento mediático que lleva sufriendo seis meses
Carolina Molas lleva en el ojo del huracán desde que su hijo, Íñigo Onieva, le fue infiel a su (otra vez) prometida, Tamara Falcó. Desde entonces (en concreto, desde el pasado mes de septiembre), la madre del empresario vive día sí día también con cámaras y reporteros alrededor.
Una expectación que, al principio, parecía no incomodarle, pero que pasados los meses ya resulta intolerable para ella. Por eso, ha tomado la decisión de mandar un comunicado a Telecinco, donde se sigue su pista desde hace semanas.
El comunicado que ha enviado la madre de Íñigo Onieva pidiendo que se la deje en paz
La madre de Íñigo Onieva —que es consejera de la compañía familiar de electrodomésticos, Cemevisa, y está muy reconocida en el sector— ha mandado un comunicado al programa Ya es mediodía para pedir a los medios que se respete su derecho a la intimidad.
Así, la futura suegra de Tamara Falcó ha hecho un llamamiento en el que asegura ser consciente del interés mediático que tiene pero, al mismo tiempo, pide que se le respete.
«Como madre de Iñigo Onieva soy consciente de la relevancia mediática de su compromiso con Tamara (…), pido que se respete mi derecho al honor, a la intimidad y a la propia imagen de mi persona», se lee en el comunicado.
Un grito desesperado con el que Carolina Molas pretende escapar del foco mediático, pues está cansada del seguimiento mediático que lleva sufriendo ya seis meses.
Carolina Molas no participará en la exclusiva de la boda
Asimismo, y en conversación con Isabel Rábago, una de las colaboradoras del mencionado programa, la madre de Íñigo Onieva asegura que no es amiga de Isabel Preysler, como se ha asegurado en varios medios, pero que obviamente se lleva bien con ella.
También, y lo que es más coherente, afirma que ni ella ni ningún miembro de la familia de su hijo tiene ninguna intención de participar ni aparecer en ninguna imagen que se haga pública del enlace.
De esta forma, se asegura, al menos, el respeto por parte de la prensa rosa, pues cuando un famoso participa en una exclusiva ya no hay vuelta atrás ni comunicado que valga (normalmente.
Veremos si los reporteros hacen caso a esta llamada de auxilio o si siguen ‘acampando’ delante de su casa.